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A cinco semanas de las elecciones presidenciales y con cinco candidatos en el ruedo, la percepción ciudadana y de los analistas es que la campaña sigue estancada y que los candidatos recorren el país sin muchas propuestas. Es más, la crítica se agudiza cuando algunos candidatos deciden no asistir a los debates que están programando las universidades.
Los analistas han puesto su atención, por ejemplo, en el hecho de que una campaña que se esperaba girara en torno a propuestas sobre la paz, ni siquiera eso ha pasado y hasta ahora lo que se ha visto es un rifirrafe, entre algunos de los contrincantes, que no trasciende.
De hecho, diferentes sectores han calificado la contienda de "mediocre" en vista de que ninguno de los candidatos tiene amplia favorabilidad en los escenarios de opinión y pese a que en algunos casos completan varios meses haciendo campaña, no tienen recordación. A este escenario se sumaría que en las actividades proselitistas en plazas públicas brillan por su ausencia, y ni siquiera la propaganda se ve en los centros urbanos.
Y lo más graves es que la apatía de los ciudadanos retratada en las encuestas podría generar otro fenómeno relacionado con la falta de legitimidad de quien se quede con Presidencia.
"La discusión será si quien quede elegido lo hará solo con el 20 por ciento de los votos. En una democracia eso es dañino, pero no imposible, y ese escenario sí se podría presentar", dijo el abogado constitucionalista
Juan Manuel Charry.
A esto se le suma que la falta de carisma de los candidatos es un factor clave que está repercutiendo en los electores, que no estarían interesados en conocer las propuestas de quienes les parece que son más de lo mismo.
Y como si fuera pocos factores ya sumados, no hay un tema coyuntural que permita conocer posiciones radicales y diferenciadoras.
"El factor de fondo es que por primera vez en muchos años Colombia llega a unas elecciones sin tener la sensación de que los resultados van a decidir aspectos vitales para la supervivencia", explicó el analista político
Andrés Mejía.
Si bien el proceso de paz con las Farc es uno de los temas que está en juego, los colombianos no creen que ese grupo armado se esté fortaleciendo, lo que le quita trascendencia al proceso, agregó Mejía. "En estas presidenciales nadie tiene la sensación de que la guerrilla, pase lo que pase, se va a tomar el país, el desempleo está en unos mínimos niveles que no se veían hace 15 años y la situación económica es favorable, entonces no hay asuntos de vida o muerte y eso genera falta de entusiasmo del electorado".
En últimas, según los analistas, no es que la campaña sea aburrida, lo que pasa es que es algo que ha sido tan anunciado que eventualmente se termina perdiendo el interés. "Aquí lo que vamos a presenciar es cómo se dirime el enfrentamiento entre dos sectores, en medio de unas. tercerías que tampoco están calando en la opinión", precisó Charry