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Para poner un ejemplo: lo que una familia de tres personas se gasta en 85 años en arroz, es lo mismo que consumirán en 12 días los deportistas de los IX Juegos Suramericanos alojados en la Villa Suramericana.
Así se desprende al hacer una ecuación basada en las cifras que entrega La Vianda, firma encargada de la alimentación de los atletas, que día a día vive toda una odisea para satisfacer el apetito y las necesidades alimentarias de este personal.
Dice Fabián Navarro, gerente comercial de la empresa costeña, que en estas competencias se consumirán 30 mil libras de arroz. Si consideramos que una familia de tres personas gasta una libra de arroz al día, al año serían 365 libras y unas 30 mil en 85 años, "es una cosa de una dimensión muy grande", afirmó Fabián muy tranquilo en las carpas habilitadas como comedores en la Villa, donde uno se siente como en otro mundo, un mundo de atletas de cuerpos perfectos, la mayoría amables y sonrientes.
Ayer llegamos a hora de almuerzo y la afluencia de personas era mucha en las filas para elegir el menú. Las mesas del restaurante estaban prácticamente copadas.
Mientras los deportistas y personal de las delegaciones pasaban con sus bandejas, en las que se veían carnes, ensalada, jugo, arepas, arroz, frutas y comapanes, Fabián soltaba datos.
Para empezar, tiró esta perlita: "para todos los juegos se van a gastar unas 100 toneladas de carne, incluido pollo, cerdo, res y pescado, que ha gustado mucho".
Y cien toneladas equivalen a 100.000 kilos, una cantidad que a uno ni le cabe en la cabeza imaginarla.
Pero además, los deportistas gastarán 30 mil litros de leche, 300 mil yogures y 200 toneladas de frutas y verduras. Cada día, en la Villa Suramericana se están consumiendo 500 kilos de pastas, que es otro de los alimentos preferidos por los atletas, confirmaron varios de ellos.
Arepa, yuca, plátano...
Hay algunas comidas que varios han disfrutado a plenitud. Los chilenos han gozado con las arepas y los plátanos maduros con queso que les ofrecen en la Villa y que ellos llaman bananas.
"Están ricos, la comida ha estado muy buena", afirmó Guillermo Araya, del equipo de baloncesto, que pese a ello no puede comer a sus anchas, pues sus técnicos ejercen un severo control sobre lo que pueden consumir.
A la joven argentina Carla Simonato, del equipo de balonmano, la tienen encantada con el pollo, los patacones y la yuca, "todos muy riquísimos", comentó afuera de la Villa, pues en el restaurante no se les puede entrevistar.
Explica Fabián que el menú lo componen 30 opciones entre lácteos, líquidos, cárnicos y frutas y que fue definido entre su empresa y un grupo de nutricionistas de la Universidad de Antioquia, expertos en alimentación de deportistas, que determinaron un consumo de 5.500 calorías por día.
"Nosotros suministramos la alimentación en los Juegos Centroamericanos de Cartagena de 2006, tenemos 30 años de experiencia", manifestó el empresario.