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En una decisión que sorprendió a muchos, anoche fue elegida como la nueva Señorita Colombia la representante del Valle, María Catalina Robayo Vargas.
De 21 años y 1,71 m. de estatura, la ganadora había sido noticia desde el año pasado luego de que tuvo que devolverse del Reinado y cederle el puesto a Diana Salgado, su coterránea destituida que gracias a una tutela recuperó su corona y volvió al concurso.
La paciencia parece haber premiado a María Catalina, quien volvió este 2011 con la ventaja de un año más de preparación, que finalmente se notó en su porte, elegancia y seguridad.
La valluna se impuso ante la representante de Magdalena, quien quedó de virreina, y además dejó por fuera a la gran favorita, Huila, quien debió conformarse con el título de primera princesa.
Como segunda princesa quedó Bolívar y como tercera princesa fue elegida el mayor "palo" del Reinado, la señorita Bogotá, Diana Juliette Mina.
Respuestas a tono
Este año no hubo "osos reales" con las preguntas del jurado, algo que varios asistentes del Getsemaní lamentaron con jocosidad.
A Huila le fue bien con su respuesta: preferiría que las familias con problemas de fertilidad adoptaran a un niño cartagenero en vez de someterse a tratamientos.
Magdalena se refirió a la igualdad entre hombres y mujeres, Bogotá planteó que desde la familia se puede luchar contra la violencia, Bolívar expuso en pocas palabras la diferencia entre la mirada de un niño y un anciano y, finalmente, Valle dijo que el uso de la tecnología puede generar libertad o esclavitud dependiendo de como se use.