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Tiene un buen empleo, es desarrollador de software y logrará este año lo que casi nadie logra: jubilarse a los 32 años. No de trabajo sino de edad. Se dedicará a viajar con su esposa.
Esa historia, real, la leí esta semana en un semanario estadounidense. El hombre, de por sí, está muy contento, pleno.
Al tiempo, me llegó un escrito sugerente: ¿Cómo estar más satisfecho con su vida según la ciencia?
Distintos estudios, inconexos entre autores, tiempo y lugar, han sugerido algunos aspectos incidentes en una mayor satisfacción de vida, no de felicidad que es diferente.
El hombre que se jubilará está satisfecho, lógico. Ahorró, fue disciplinado, no gastó en esas exigencias de la vida moderna. Ha tenido carro de segunda, una casa barata, prefiere cenar en casa con su esposa. Y aunque piensa dedicarse a viajar, no dejará de desarrollar software (no vinculado a una empresa ya), a escribir y componer música.
Un afortunado. Pero entonces ¿cómo estar más satisfecho con la vida según los estudios científicos?
Para resumir, debería mirarse estos cinco puntos:
Amigos, tener una historia de vida, tener metas, saber que el dinero no es la respuesta y no dejar de crecer.
Todo ello, lógico, con una sólida familia.
Tener amigos cercanos aumenta la satisfacción hasta un 19 por ciento; escribir la historia de vida brinda significado a la vida según estudios y quienes lo hacen son un 10 por ciento más satisfechos; fijarse metas (no son grandes metas, pueden ser sencillas), tener pasión por algo, no desanimarse ante el fracaso aumenta la satisfacción en 20 por ciento.
Encontrar el significado de la vida aumenta la satisfacción de la vida el doble que tener riqueza material.
Lo otro es no dejar de crecer: pequeños cambios en la vida, leer y nunca dejar de aprender, tener mente abierta, mantener valores firmes no negociables.
Dos apuntes: lo de los porcentajes es solo ilustración. Y los cinco temas citados tienen variantes. Pero esto demuestra que estar satisfechos con la vida no es tan difícil a veces. hay que tener claridad.
Quien canta su mal espanta, dice la canción. Y hoy estamos inundados de personas que se quejan por todo, quejaderas perennes que es lo grave porque de vez en cuando también convienen al espíritu.
Maullido: en reunión alcaldes del oriente plantearon que el túnel beneficia más a gentes del Aburrá. Y tienen razón.