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Como prueba de la responsabilidad social de EL COLOMBIANO con sus trabajadores y sus familias; la sociedad y sus proyectos de democracia, bienestar y justicia social; y la defensa del ambiente, en sus 100 años el diario se reinventa y reafirma su compromiso con un futuro más promisorio y sostenible.
Los accionistas de la compañía lideran acciones sociales a través de las fundaciones Julio C. Hernández y Casa de La Chinca , para hacer más fuerte su compromiso con la comunidad.
Tan importantes como los salarios y prestaciones sociales, la empresa ha institucionalizado una serie de servicios y beneficios para mejorar las condiciones de vida de los trabajadores, los jubilados y sus familias.
Si destacamos algunos logros, son numerosas las iniciativas por un mejor bienestar de todos sus colaboradores, como los préstamos para vivienda, vehículo, estudio, libre inversión, seguros de vida, medicina prepagada, programas de capacitación, formación y entrenamiento de los empleados y un incentivo al ahorro a través de un plan institucional.
Su visión por la construcción de un país más incluyente y rico en oportunidades, llevó a la empresa a crear el Premio El Colombiano Ejemplar para exaltar la vida de personas e instituciones, de las más diversas condiciones, profesiones y disciplinas sociales, que han hecho de sus vidas ejemplos dignos de imitar, en las categorías de solidaridad, economía, turismo, deporte, cultura, ciencia y tecnología, ambiente, colombianos en el exterior e infantil.
Son numerosas las personas e instituciones responsables, solidarias y con trascendencia en la comunidad, que han logrado sueños y dejan huella con sus acciones.
La experiencia ha permitido probar al mundo que nuestro país es una impresionante cantera de colombianos ejemplares. Más de 150 personas e instituciones forman parte de este grupo, desde 1999 n