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HISTÓRICO
Cometa del siglo se juega la suerte
  • Cometa del siglo se juega la suerte
Por RAMIRO VELÁSQUEZ GÓMEZ | Publicado

Lleva miles de años viajando y está a punto de pasar las pruebas más difíciles. Si las supera, será un espectáculo inolvidable.

El cometa C/2012 S1, conocido como ISON por el sistema con el que fue descubierto en septiembre, se acerca al Sol y a la Tierra. De acá a la próxima semana pasará por la llamada zona de hielos (donde se congelan compuestos del hidrógeno) más allá de la órbita de Marte y esa será su primera prueba pues comenzará a sentir con fuerza la influencia solar.

Los científicos creen que es un cometa ‘sin experiencia’ para enfrentar estas fuerzas pues se trataría de su primera aparición por el Sistema Solar interior. El ISON conservaría sus capas superiores con materia prístina de los primeros días de la formación del Sol y sus planetas.

Muchos cometas, indica un informe de la Nasa, murieron en esta primera prueba.

Por el brillo que tenía a la distancia a la que fue hallado, a más de 900 millones de kilómetros, no dudaron algunos astrónomos en llamarlo el cometa del siglo: tan brillante sería tras pasar cerca al Sol a fines de noviembre, que emergería triunfante en diciembre como un objeto con un brillo como el de la Luna llena.

Pero del dicho al hecho hay mucho trecho. El brillo indicaba que podría ser un cometa enorme, como el recordado Hale-Bopp que tenía un núcleo de 30 kilómetros. Pero parece es mucho menor, de unos 4 kilómetros y el que se hubiera visto a la distancia en que fue detectado indica que mantiene una actividad alta.

Ignacio Ferrín, profesor de Astronomía de la Universidad de Antioquia, investigador experto en cometas llamó la atención sobre este hecho. "El ISON ha mostrado un ‘punto de enlentecimiento’, a partir del cual su brillo se ha mostrado constante, sin la menor tendencia a aumentar. Este punto ocurrió el 13 de enero".

Luego, por unos 132 días la curva de luz ha sido plana, lo cual sugiere que de ninguna manera llegará a ser tan brillante como la Luna llena.

La Nasa, ante las expectativas creadas, diseñó una campaña de observación del astro, con información continua. Esta sugiere, en consonancia con Ferrín, que "el brillo ha permanecido más o menos constante en estos 12 meses".

Para Ferrín, el comportamiento indica que el cometa tiene una fuerte deficiencia en agua, o que una capa superficial no volátil de roca o polvo de silicato impide su liberación al espacio.

Imágenes del telescopio espacial Spitzer de junio 13 revelaron que del cometa se está desprendiendo una gran cantidad de dióxido de carbono y polvo. "Estimamos que emite cerca de 2,2 millones de libras de CO2 y cerca de 120 millones de polvo cada día", de acuerdo con Carey Lisse, líder en la Nasa de la campaña de observación del ISON.

Cuando cruce la línea de hielos a entre 370 y 450 millones de kilómetros del Sol, podría perder más agua.

Ferrín recordó que el cometa C/2000 O4 Hönig permaneció con el mismo brillo 52 días y luego se extinguió sin dejar rastro.

En unas dos semanas los astrónomos podrán ver al cometa de nuevo con telescopios en tierra y se sabrá más de su composición, así como del estado en que cruzó la línea de hielos. Desde junio ha estado detrás del Sol visto desde la Tierra.

Si sobrevive, la gran prueba vendrá a fines de noviembre. La trayectoria del cometa dice que el 28 de noviembre cruzará a 1.200.000 kilómetros del Sol. Dos semanas antes sentirá una elevada radiación y sufrirá una enorme evaporación de material.

"La temperatura será de 2.700 grados Celsius", indicó Ferrín. Para la Nasa, un posible escenario es que se evapore por completo y quede, en el mejor caso, una estela tenue.

La otra posibilidad, de acuerdo con los directores de la campaña de observación, es que sobreviva y se convierta de verdad en el cometa del siglo. Los optimistas recuerdan que el cometa Lovejoy pasó a solo 87.000 kilómetros de la estrella y sobrevivió.

La Nasa no se atreve a decir cuál será su suerte. Después de todo, como indicara el astrónomo y escritor David Levy, los cometas son como los gatos: tienen cola y hacen lo que les viene en gana.

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