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Los lazos de sangre pueden atarse a través de una simple línea virtual. Así comenzó a hacerlo Gloria Naranjo, una caleña que se topó con el sitio web Myheritage.es, con el que pudo reconstruir la historia de su familia.
El asunto comenzó cuando su papá, Jorge Naranjo Ríos, quien había emigrado de Colombia a Estados Unidos hace un par de años, volvió de paseo a Cali. En el país del norte había creado una nueva familia pero seguía teniendo contacto con sus hijos en Colombia.
Gloria quería que esa historia, por vía del abuelo paterno, de la que hay 57 nietos y 87 bisnietos, quedara registrada como bitácora de vida para los más bebés, quienes quizás aspiren a encontrar, en el futuro, de dónde vienen.
Con fotos antiguas, conversaciones casuales en encuentros familiares, imágenes de Facebook y mucha paciencia, ha ido reconstruyendo la línea de tiempo que viene de sus antepasados.
Con 400 familiares que ha vinculado al "retrato de familia", con historias suyas y que otros también han creado, ha encontrado parientes, casi que perdidos, de los que no había vuelto a saber nada, como un primo, que ahora vive y trabaja en Kuwait.
Su sobrina, Carolina Naranjo, quien vive en E.U. desde pequeña, le dijo a Gloria a raíz de esta entrevista, que a sus 32 años no sabía que su familia fuera tan grande.
En esta labor no ha estado exenta de reordenar "verdades normales de la vida", como ella las llama, como cuando la esposa de un tío aparecía como madrastra de un pequeño que había nacido por fuera del matrimonio.
De inmediato, corrigió el asunto en un sitio con un desarrollo informático que permite que haya un administrador que controla los cambios que otros, por error, omisión o simple descuido, ingresan.
De acuerdo con Ania Rivera, directora de Comunidades de MyHeritage, en entrevista con EL COLOMBIANO, desde la sede en Tel Aviv, en Israel, en la actualidad hay 50 millones de usuarios en el mundo en esta red, fundada en 2005, que ahora se expande a otros países. En Colombia hay 164 mil abonados.
Explica que esta iniciativa permite que los usuarios enriquezcan su árbol genealógico a su ritmo e intereses. Ellos no interfieren con la privacidad de cada perfil y, al contrario, les proporcionan herramientas tecnológicas y apoyo de genealogistas para que puedan concluir su trabajo.
Resalta que hay familias que se tardan años en consolidar su descendencia, pues un apellido puede cambiar de un país a otro, o de una época a otra. Por ello aconsejan tener "pasión, ganas y paciencia".
Uno de los miembros del equipo, con una combinación de genealogista y geek es el venezolano Daniel Horowitz, quien revela que Myheritage.es/investigacion es una herramienta que realiza la búsqueda en más de 1.500 bases de datos de genealogía en el mundo y utiliza diferentes variaciones ortográficas.
"Hemos ayudado a muchos usuarios a realizar increíbles hallazgos y contactarse con familiares que no conocían", dice.
Recuerda un mail de una persona en el que le agradecía porque había hallado familiares en varios países y luego de rastrearlos pudo hacer un encuentro con 200 de ellos. "Nos demostró que con el trabajo que realizamos podemos cambiar la vida de muchas personas".
Como le sucedió a Gloria, quien ahora se conectó con sus parientes a través de un lazo de sangre muy virtual.