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Por considerar que el proyecto tiene vicios de trámite, la Corte Constitucional declaró inconstitucional el referendo de cadena perpetua contra violadores de niños.
La Corte señaló que en el trámite en el Congreso de la República se le hicieron al proyecto cambios sustanciales, así como adiciones que no estaban en el texto original.
Pese a que el alto tribunal afirmó que no hubo errores en la recolección de firmas ni en su financiación, seis de los nueve magistrados consideraron que tenía vicios de fondo.
El referendo buscaba modificar el Artículo 34 de la Constitución, que actualmente prohibe las penas de destierro, confiscación y prisión perpetua en Colombia.
"Esto no terminó acá", dijo la senadora electa Gilma Jiménez, al conocer la decisión de la Corte.
Agregó que no son noticias "buenas para los niños colombianos, ni para dos de millones de colombianos que de forma generosa consiguieron las firmas, ni para la sociedad colombiana".
Y es que, la iniciativa tuvo las firmas necesarias en tiempo récord: entre septiembre y diciembre de 2008, el comité promotor recogió más de dos millones de firmas para llevar el proyecto al Congreso.
Por eso, Jiménez agregó que recibió la noticia con mucho dolor y que se informará de los argumentos de los magistrados de la Corte. Aseveró que "está visto que en este país proteger los derechos de los niños es mucho más difícil".
Por su parte, José Gregorio Huertas, el padre de la niña Catherine, quien fue asesinada en Bogotá y era el símbolo de la campaña por el referendo, afirmó: "Tengo una tristeza muy grande de ver la justicia en Colombia, que no se apruebe un proyecto que es para tratar una enfermedad, un tipo de esos tiene que estar encerrado".
"Me da tristeza ver, además, que a ese asesino de mi niña le rebajaron 13 años. La condena está en 27 años, pero como la justicia es tan elegante, si se porta bien va a cumplir solo como seis. Estoy de acuerdo con la doctora Gilma, ella dijo que se perdió la guerra pero no se ha perdido la batalla".
Y les dijo a los magistrados que "ellos no han sufrido en carne propia ese dolor, pero yo como padre de familia sí he sentido ese dolor".
Por su parte, la mamá de la niña, Natividad Vargas, afirmó que "definitivamente no sé qué es lo que pasa. Es una injusticia tan grande que se está cometiendo con nosotros y si las cosas siguen así, pues toca ir con la justicia internacional a ver qué pasa".