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No son organismos modificados genéticamente como los controvertidos de hoy, sino productos de otra técnica con genes con la cual podrían tener mejor sabor, serían más dulces y hasta con un mayor contenido de antioxidantes.
Sí, científicos presentaron una nueva forma para mejorar las frutas diferente a la que se hace con los Organismos Genéticamente Modificados.
Se trata de frutas editadas a las que se les editaría el genoma para mejorar algunas características no solo de las frutas sino de otros cultivos.
Esto es posible gracias a las nuevas herramientas para editar genomas y al mayor conocimiento que se tiene de estos.
Chidananda Nagamangala Kanchiswamy, Daniel James Sargent, Riccardo Velasco, Massimo E. Maffei y Mickael Malnoy presentaron ayer el avance en Trends in Biotechnology.
La mayoría de los cultivos transgénicos se basan en bacterias que introducen genes que alteran algunas características de la planta, como la resistencia a pesticidas y algunas plagas.
Los OGM, como se les conoce, generan tal resistencia que muchos países europeos aún no los introducen por preocupación de los grupos de ambientalistas.
Pero la edición genética es diferente. "El solo evitar la introducción de genes ajenos hacen los cultivos editados más naturales", dijo Nagamangala, del Instituto Agrario San Michele en Italia.
Pero, ¿cómo se lograría esto? Los cambios en las características de las frutas, dijeron los autores, se obtiene mediante pequeños ajustes genéticos para aumentar o disminuir la cantidad de ingredientes naturales que las células de las plantas producen.
Para eso existen unas técnicas, conocidas como Crispr y Talen que permiten la inserción de genes específicos para modificar o remplazar genes de su sitio sin involucrar otra fuente del ADN.
Podrían surgir así versiones genéticamente editadas de OGM como superbananos que producen más vitamina A o manzanas que no se tornen cafés al cortarlas.
Hasta ahora esas herramientas no han sido aplicadas a la modificación genética de las frutas.
Para los autores, esta edición es una estrategia natural de utilizar la biotecnología para una agricultura más sostenible. Y no demorará.