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Cuando las conversaciones se realizaban en su mayoría cara a cara o mediante un teléfono convencional, el lenguaje que se utilizaba no tenía ninguna variación. Inclusive, al escribir largas cartas a lápiz y papel, se mantenía la estructura del idioma. Con la llegada de internet esto cambió y cada vez más las palabras y frases se acortan hasta llegar a menos de cinco letras.
Tanto en Facebook como en los chats de Whatsapp y otras aplicaciones, es pan de cada día leer, sobre todo entre el público más joven, expresiones como LOL, OMG, WTF o ASAP, por mencionar las más populares.
Estas expresiones le dieron paso a nueva jerga entre los cibernautas, quienes al querer comunicar de forma rápida alguna de las frases universales en inglés, las redujeron a las primeras letras de sus palabras para agilizar la conversación en los espacios virtuales.
Sobre este tema, escribe el comunicador social y docente peruano, César Mauricio Ramírez, en su blog Papá Digital, que hace parte del diario El Comercio de ese país. Mauricio manifiesta que es común para el escuchar duras críticas, por parte de los adultos mayores, sobre el comportamiento de los jóvenes en internet y del vocabulario que allí utilizan.
“Nosotros también teníamos nuestros defectos, también criticados por los mayores, como cuando te quedabas horas hablando por teléfono ¿o no? Nuestras vidas pasaron, sin previo aviso, del mundo análogo al digital, pero el asunto no es solo de aparatos sino de un nuevo orden social por entender”, explica.
Mauricio agrega que parte de su trabajo en el blog y en sus artículos es ayudar a cerrar la brecha digital entre adultos y jóvenes, sobre todo si son padres y no comprenden lo que hablan sus hijos en la red.
“No se trata de aburrirse cuando lean en los muros de Facebook de sus hijos o de otras personas expresiones como #YOLO #BTW o #DIY, este es el lenguaje informal que tal vez utilizan tus hijos, algo así como las jergas que nosotros utilizábamos (o aún lo hacemos) con nuestros grupos de amigos”.