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Si uno quisiera comparar los dividendos, transferencias a la salud, y los impuestos que paga el Grupo Antioqueño de Apuestas, Gana, desde su creación hasta ahora, sería una labor maratónica. La estadística no se dificultaría por la falta de información sino por lo contrario: exceso. Pasó de manejar apuestas manuales, por medio de talonarios, a hacerlo desde una red de servicios sistematizada. Por eso no hay una base de partida para la comparación. Ese salto lo dieron hace siete años cuando se consolidó la compañía que tiene la concesión de las apuestas permanentes en Antioquia. Para eso fue necesario reunir a los 110 empresarios que controlaban el negocio y, en conjunto, consolidaron la red que hoy muestran como ejemplo. Dice Mauricio Álvarez Berruecos, gerente de Gana, que esos empresarios son socios del grupo de apuestas. En un proceso incluyente en el que algunos de un uno por ciento, reciben dividendos y tiene voz y voto dentro de las asambleas.
El directivo ejemplifica las ventajas de los puntos de red. Dice que antes, cuando se hacían los chances manuales, el apostador tenía el riesgo de que el vendedor escribiera mal un número, o que no entregara el total del talonario al final de la jornada, muchos que se creían ganadores no recibían los premios por las inconsistencias. Ahora es imposible que eso pase. Cada uno de los asesores comerciales cuenta con un dispositivo que envía la información a un servidor en tiempo real, con lo que se hace efectiva la apuesta y se visibilizan las cuentas para su control en Benedan.
Aprovechamiento de la red
La asociatividad empezó a marcar el camino que siguió la compañía. Hoy son 12.500 empleados: 4.500 directos y 8.000 con contrato de colocadores quienes reciben beneficios de salud, recreación y capacitación. Un gran porcentaje son mujeres cabeza de familia, adultos mayores y personas en situación de discapacidad. Los que antes eran “chanceros”, es decir, la fuerza de ventas, ahora son asesores comerciales, debidamente capacitados. La presencia en el departamento es tal que como mínimo en cada uno de los 125 municipios hay una oficina principal o Ganasevicios, y la red de ventas está en todas las veredas.
Según explican los directivos, es un gran impacto para la comunidad que accede a los servicios de bancarización, puede pagar facturas sin desplazarse, hacer recargas y giros y hasta recargar los servicios públicos prepagados, pagar los planes exequiales o comprar seguros. Este giro en el negocio ha hecho que hasta el estado los busque para la colocación de subsidios del programa “Prosperar”, que beneficia a los adultos mayores. Actualmente trabajan en alianzas con otras entidades de su tipo para llevar sus productos a otras zonas de Colombia y exportar el modelo a diferentes países en donde se realizan los estudios de mercado con combinación de las apuestas y los servicios.