No cesa la controversia por una reciente determinación de la Procuraduría General de la Nación que evidenció que
hubo ‘chuzadas’ en esa entidad, mientras el jefe de ese organismo era Edgardo Maya Villazón.
Luego de conocerse la destitución e inhabilidad para ejercer cargos públicos durante 12 años a la entonces directora nacional de Investigaciones Especiales, Luz Dary Henao,
el exprocurador Maya criticó la determinación diciendo que ella cumplía órdenes y que él
firmó las autorizaciones para interceptar las comunicaciones de un funcionario.
Ahora, el procurador Alejandro Ordóñez ratificó que en ese periodo
sí se habrían realizado interceptaciones de forma irregular.
“La primera decisión que tomé como Procurador fue
clausurar una sala de interceptaciones que existía en la Procuraduría por considerar, en ese momento, que al parecer se estaban haciendo interceptaciones irregulares. Mal haría la Procuraduría, garante de garantías, defensora de los derechos de los ciudadanos, prohijar este género de interceptaciones irregulares”, apuntó.
El Jefe del Ministerio Público agregó que
la determinación se tomó y se llevó a cabo en febrero de 2009 por estimar que era un “escenario de desconocimiento, de violaciones de los derechos de los ciudadanos”.
Sobre esta controversia,
el exprocurador Maya afirmó que se podría apelar esta decisión y que acudirá a la Fiscalía para que analice el caso.
En la determinación sobre Henao adoptada por la viceprocuradora, Martha Isabel Castañeda, se indica que
la funcionaria coordinó la interceptación de teléfonos de la Procuraduría sin contar con un auto de apertura de indagación preliminar o una investigación disciplinaria que se adelantara extralimitándose en sus funciones.