viernes
7 y 9
7 y 9
Si se le pregunta al exsoldado Juan Carlos Navarrete qué es lo que más recuerda del general Javier Alberto Flórez, comandante del Estado Mayor del Ejército, responde: "Aquellos momentos en los que después de las operaciones militares, llegaba con almuerzo para toda la tropa, cansada y hambrienta".
El general Flórez es respetado, afirma Navarrete, pero también muy querido por la calidez con la que se acerca al soldado raso. "Él conocía los problemas de cada uno de los militares bajo su cargo y de sus familiares. Entonces tenía gestos muy humanos, como mínimo, el de preguntar por ellos y estar pendiente".
Flórez, ahora líder del grupo de militares activos que viajó a La Habana el pasado viernes para asesorar el Gobierno, y discutir temas con las Farc como el desarme y la desmovilización, ha vivido en 32 batallones, razón por la cual conoce el país, como conoce a cada uno de sus soldados.
Entre sus victorias militares se encuentra la muerte de alias "el Mono Jojoy", jefe del bloque Oriental de las Farc y comandante militar de esta guerrilla, el 23 de septiembre de 2010; también la muerte el 4 de noviembre de 2011 de "Alfonso Cano", jefe máximo de las Farc a quien persiguió por tres meses en las montañas del Cauca, con 25.000 hombres de la Fuerza de Tarea Omega bajo su mando. Además, acorraló a "Fabián Ramírez", del Bloque Sur.
En las Fuerzas Militares es uno de los oficiales más destacados y reconocidos, y de los que más sabe de las Farc, sus movimientos, sus puntos de concentración, sus rutas, la estrategia del grupo guerrillero y sus debilidades.
Un hombre recio y humano
El llamado de un militar con las características del general Javier Alberto Flórez, es visto por el especialista en conflicto armado, Juan Carlos Ortega, como una jugada estratégica pensada en el posconflicto, al ponerles al frente a las Farc un hombre que les ha dado duros golpes. "Se puede mostrar de esta forma que se puede dialogar entre combatientes sin rencores, lo que muestra un avance muy significativo de los diálogos".
Juan Carlos Pinzón, ministro de Defensa, expuso que el llamado del general Flórez a la mesa de diálogos, no obedece a otra situación distinta a la de analizar algunos puntos que serán entregados al Gobierno y a su delegación para tomar decisiones en el proceso.
Según Pinzón, Flórez es un general al que no se le puede cuestionar su valor como un militar recto, como combatiente y como guerrero "que dio golpes contundentes y decisivos a las Farc".
Todas estas variables las tuvo en cuenta el Gobierno para enviar al general Flórez a Cuba. Para dialogar con las Farc, necesitaban un hombre que conociera la guerrilla a fondo, y quién mejor que el militar tropero que las ha combatido por más de 35 años