La aceptación del presidente de la República, Álvaro Uribe, a las liberaciones unilaterales de secuestrados, dio un nuevo aire a las gestiones del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) y la Iglesia Católica, por lograr un acercamiento con las Farc.
Al tiempo que celebraron la decisión en favor de la libertad de 23 policías y militares en cautiverio, el CICR y la Iglesia Católica se declararon listos para coordinar el operativo humanitario.
El secretario general de la Conferencia Episcopal, monseñor Juan Vicente Córdoba, aseguró que su congregación está en plena capacidad de ayudar, pero que falta conocer la postura de la guerrilla.
"Invitamos a las Farc para que respondan al anuncio del presidente Uribe. En cuanto esto pase, nos pondremos en contacto con ellos para ultimar las liberaciones", dijo el Alto Jerarca.
Monseñor Córdoba afirmó que junto a la senadora Piedad Córdoba, seguirán insistiendo para que en muy poco tiempo, tal como lo pidió el presidente Uribe, puedan estar todos los secuestrados en libertad.
Las garantías
Por su parte el CICR ofreció sus buenos oficios en lo que a medidas de seguridad se refiere. Voceros del organismo afirmaron que "así como se ha hecho en el pasado", las futuras liberaciones contarán con las garantías de seguridad necesarias.
Lo más importante, agregaron, será velar por la integridad de los secuestrados, así como de quienes integrarían la comitiva humanitaria.
Por último el CICR reiteró que la logística está lista para el momento en que las Farc anuncien las condiciones de tiempo, modo y lugar, de la entrega de los cautivos.