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El ministro de Energía y Minería de Venezuela, Rafael Ramírez, informó este lunes que el incendio que afecta desde la madrugada del sábado la refinería de Amuay, una de las mayores del mundo, se extendió a un tercer tanque, mientras baja su intensidad en los otros dos, que, según el ministro, deberían extinguirse mañana.
Además las llamas elevaron a 48 el número de muertos que dejó la explosión y aún permanecen 31 personas internadas en hospitales de Punto Fijo y Maracaibo, con diferente grado de gravedad aunque "estables".
"Tenemos que anunciar que un tercer tanque, el tanque 204, que ha estado permanentemente con el foco del fuego en el techo (...) perdimos el techo, lo perdimos y, en consecuencia, el tanque también está incendiándose en este momento", indicó Ramírez.
El también presidente de la estatal Petróleos de Venezuela (Pdvsa) indicó que el tanque contiene 260.000 barriles de nafta catalítica, igual que los otros dos afectados, y tenía un techo flotante que se desprendió.
"A pesar de que tuvimos ese incidente con ese tanque, mantenemos el concepto de ir controlando y confinando el evento", señaló Ramírez.
Señaló que las condiciones climáticas en la zona con fuerte viento están dificultando la tarea de extinción por la necesidad de preservar la seguridad de los bomberos.
"Cada vez que nos cambia la dirección del viento (...) tenemos que variar la posición de ataque al fuego porque tenemos que estar viento arriba del fuego", indicó.
La refinería de Amuay, en el Centro de Refinamiento de Paraguaná (CRP), sufrió una explosión en la madrugada del pasado sábado a causa de un escape de gas que provocó inicialmente el incendio de nueve tanques de combustible y destrozos y derrumbes en las viviendas aledañas, causando la muerte de al menos 48 personas, según reportes oficiales.
Estimó que "al ritmo, con el tema de la brisa y todas las condiciones que hay", los dos tanques inicialmente incendiados deberían extinguirse ellos mismos "hasta el día de mañana".
"Sin embargo, este nuevo tanque nos obliga después de que esos dos se extingan, a seguir concentrando todo el esfuerzo para extinguir el incendio en su superficie", indicó.
Ramírez explicó que los tanques están "confinados en diques de contención diseñados para una contingencia como esta" y para contener el combustible que se pueda desbordar.
Agregó que todas las capacidades de la refinería están "intactas" y que los muelles están funcionando y "despachando buques".
El presidente venezolano, Hugo Chávez, visitó a lo largo de la jornada distintas zonas de Punto Fijo, incluidos los hospitales en los que están siendo atendidos los enfermos.
El gobernante no ofreció nuevos datos sobre la situación de la refinería pero afirmó que hay "cerca de 500 viviendas afectadas", y que cerca de un 10 por ciento de ellas "tiene una destrucción casi total".
Agradeció los mensajes de solidaridad y las ofertas de colaboración llegados desde otros países, pero aseguró que no es necesaria la ayuda porque el Gobierno cuenta con los elementos que requiere para dar respuesta a la tragedia.
"Es bastante notable y agradecemos todas las llamadas y los mensajes de solidaridad de distintos gobiernos del mundo y amigos y amigas de Venezuela en todo el mundo desde Rusia hasta Buenos Aires", indicó Chávez a los periodistas.
Por su parte, el candidato presidencial de la oposición, Henrique Capriles, afirmó que la explosión refleja junto a otros hechos "la ineficacia y la politiquería" del Gobierno de Chávez.
"Cuando las cosas no se hacen bien, con responsabilidad (...), ahí están la consecuencias. Los venezolanos no tenemos por qué pagar las consecuencias de la ineficacia de quienes gobiernan", remarcó Capriles, que competirá con Chávez en la urnas el próximo 7 de octubre, en una rueda de prensa.