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La llamada del niño Johan Steven, hijo del cabo Libio José Martínez, desencajó el rostro del profesor Gustavo Moncayo y lo motivó a pedirle a Brasil que sea el facilitador de un acuerdo humanitario que permita la libertad de los 19 uniformados del Ejército y la Policía que quedan en poder de las Farc.
Una vez llegó al aeropuerto de Florencia, Caquetá, hacia las 4:56 de la tarde, el 'profe' Moncayo dijo que buscará "espacios de convivencia para lograr que nuestros policías y soldados vuelvan a la libertad en el menor tiempo posible". Y agregó que "ojalá contáramos con el apoyo de Brasil, Venezuela y Ecuador, limar asperezas y unirnos en este propósito humanitario para que las partes se sienten a dialogar".
La afirmación de Moncayo nace de la respuesta que dio el presidente Álvaro Uribe a la idea de que se concrete un intercambio humanitario, toda vez que las Farc anunciaron que no habrá más liberaciones unilaterales.
Uribe dijo que no se opone al intercambio si los guerrilleros que se liberen no vuelven a delinquir y las Farc dejan de engañar, mientras hablan de paz y ponen carros bomba.
El tema generó divisiones entre los candidatos a la Presidencia, uno de los cuales tendrá que enfrentar el tema en el próximo gobierno.
Noemí Sanín y Juan Manuel Santos dijeron que en sus eventuales mandatos no despejarán ninguna zona para negociar con las Farc.
Sanín agregó que podría buscar un acuerdo para que los secuestrados vuelvan a la libertad, aunque no profundizó de qué manera.
El candidato a la Vicepresidencia de Juan Manuel Santos, Angelino Garzón, sostuvo que el despeje no es la fórmula y que sólo se le debe exigir a la guerrilla que ponga en libertad a los secuestrados. "Deben acabar con el terrorismo y los secuestros".
Por su parte el candidato de Cambio Radical, Germán Vargas, manifestó que no comparte que por medio de ese intercambio humanitario se llegue a poner en libertad a "centenares de delincuentes" y reiteró su negativa a una zona de despeje.
Medio de acuerdo
Otro grupo de aspirantes presidenciales se mostró en parte de acuerdo con el intercambio humanitario, tal como lo dijo el candidato del Partido Verde, Antanas Mockus, quien estimó que de hacerlo será por una sola vez y de esa manera cerrar la puerta a que por medio del secuestro la guerrilla pueda manipular al Estado.
El candidato liberal, Rafael Pardo, dijo que en su gobierno le daría vía libre a un acuerdo humanitario, pero lo condicionaría a que la guerrilla se comprometa a decir públicamente que no hará más secuestros.
El aspirante Sergio Fajardo afirmñi que se puede buscar un intercambio humanitario, sin que se confunda con una negociación formal.
Jaime Araújo, también candidato, declaró que el intercambio humanitario se debe hacer porque es el primer paso hacia la paz, pero condicionó el mismo a que no haya más retenciones de la guerrilla de civiles y militares inocentes.
Y el candidato del Polo Democrático, Gustavo Petro, no descartó la posibilidad de que el Estado haga un rescate por la vía militar de los secuestrados, y agregó que la entrega de los secuestrados, debe ser unilateral.