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En el proyecto de reforma a la Ley de Educación que impulsa el gobierno, el Presidente Juan Manuel Santos, busca que el sector privado "se meta la mano al bolsillo en beneficio de la educación superior pública".
Explicó el Presidente Santos que se trata de formalizar alianzas entre el capital privado y las universidades públicas para fortalecer la calidad de la formación y la investigación y cuantifica la propuesta: "El esfuerzo conjunto entre el Estado y el sector privado podría significar unos 2,4 billones de pesos adicionales para el sector en los próximos tres años, suficientes para pasar de 1,6 a 2,2 millones de estudiantes recibiendo educación superior y pertinente y de calidad en el 2014".
La ministra de Educación, María Fernanda Campo Saavedra, defiende esa tesis y dice que el mejoramiento de la calidad de la educación y la investigación necesita aportes del capital privado, porque los recursos del Estado son limitados. Dialogó con EL COLOMBIANO sobre las tareas en competitividad:
¿Qué es lo que contempla el Plan de Desarrollo en el campo de la educación para el mejoramiento de la competitividad?
"El Plan de Desarrollo busca tres propósitos: generar más empleo, reducir la pobreza y aumentar la seguridad. Y buena parte del crecimiento está soportado en las cinco grandes locomotoras. El papel de la educación es de aportar los rieles de las cinco para movilizar las locomotoras y poder generar más empleo y más riqueza. Entonces, el plan contempla un presupuesto de inversiones de 111 billones de pesos en los cuatro años, con un crecimiento del 16 por ciento frente al cuatrienio anterior. Dentro del plan, tiene un énfasis muy importante la formación del capital humano y el mejoramiento de la calidad desde la primera infancia, hasta la formación superior. Se buscan dos grandes objetivos: mejorar la calidad de la educación en todos los niveles y cerrar brechas de iniquidad, en calidad, en cobertura, la reducción de la deserción y de los índices de analfabetismo".
Los rectores de varias universidades han señalado que hemos avanzado en cobertura, pero que nos falta en calidad...
"Exactamente, y por eso el plan, en este campo, se llama "Educación de calidad y camino para la Prosperidad" y lo que busca, a través de diferentes estrategias, es mejorar la calidad en todos los niveles. Vamos a desarrollar tres estrategias, que son transversales: desarrollo y fortalecimiento de las competencias; fortalecimiento de los sistemas de evaluación a todos los actores (estudiantes, docentes e instituciones) la creación o el fortalecimiento del sistema de aseguramiento de la calidad. Los rectores y docentes tienen que ser los líderes de la transformación de la calidad y para ello está previsto un plan de capacitación. Vamos a llegar a las instituciones de más bajos logros: son 18.000 instituciones, las más pobres, en las regiones más pobres, que atienden a la población más pobre y con los resultados más pobres. Hemos previsto llegar con un currículo básico, con altos estándares de calidad".
Los recursos que usted menciona ¿son suficientes para que la educación sea el riel de las locomotoras?
"Los recursos nunca serán suficientes para el sector educativo, pero también podría haber recursos de otros sectores, como el 10 por ciento de las regalías para la investigación y la innovación. En este caso, serán las universidades las responsables de realizar investigación e innovación y aplicar esos recursos en el desarrollo tecnológico desde las regiones".
¿Y cómo es la propuesta que hace el Presidente Santos, para que el sector privado aporte recursos a las universidades públicas?
"La propuesta que estamos sometiendo a consideración del país es que haya más recursos para las universidades públicas, en este caso, con aportes del sector privado. Va haber más plata real para las universidades públicas y más plata para el acceso de los estudiantes de bajos recursos a las universidades, a través del Icetex, en condiciones más blandas. Pero esos recursos jamás serán suficientes. Entonces, lo que se busca es que el sector privado entre a cofinanciar el sector. ¿Y cómo lo puede hacer? De varias maneras: creando universidades, para ofrecer programas técnicos y tecnológicos de buena calidad; mediante asociaciones con universidades privadas sin ánimo de lucro o mediante las alianzas público-privadas, en las cuales se unen para el desarrollo de proyectos específicos. Se firma un contrato de asociación para el desarrollo de investigación o proyectos productivos, donde el componente educativo lo aporta la respectiva universidad o para el mejoramiento de la calidad en la oferta educativa. Así se hace en varios países, en los cuales un porcentaje muy importante de los ingresos de las universidades públicas se genera en las alianzas con los privados, en las cuales se genera innovación, nuevas tecnologías o desarrollos tecnológicos o se desarrollan patentes y se generan grandes utilidades, de las cuales una parte va para los particulares y otro para las universidades públicas. Lo que queremos es complementar el financiamiento de la educación superior y, sobre todo, promover el desarrollo de la innovación y el desarrollo científico, con colaboración del sector privado".
O sea, ministra, ¿no solamente capital privado en universidades privadas, sino en las universidades públicas?
"Sí, claro, pero en proyectos específicos. No habrá privatización ni injerencia de los privados en las universidades públicas, cuya autonomía se mantiene intacta. No va a interferir en su administración, ni en sus órganos de gobierno, en los programas que ofrece o en los costos de la matrícula. Pero cada proyecto debe tener una contabilidad independiente, con definición de los aportes de cada uno".
¿El sector privado debe mirar a la educación como un gran negocio?
"El mejor negocio que puede haber en un país y en Colombia, es invertir en educación. No hay mejor negocio que invertir en la educación. Entonces, qué bueno que lleguen otros recursos a cofinanciar al sector educativo, garantizando, eso sí, una muy buena calidad. Y también nos podrá ayudar a crear fondos para financiar el acceso a la educación de los más pobres y eso podría tener unas exenciones tributarias, siempre y cuando, se destinen unos recursos importantes de esa institución de educación superior a esos fondos, que serán administrados por el Icetex".