Los derechos que reclaman las parejas del mismo sexo desde hace varios lustros en Colombia, entre ellos la adopción de niños, empieza a tener vocación de futuro con la decisión de la Corte Constitucional que avaló la adopción entre parejas del mismo sexo cuando se trata de hijos biológicos de uno de los integrantes de la unión.
La decisión se acogió tras la ponencia del magistrado
Luis Guillermo Guerrero en el estudio de una tutela presentada para que le fuera permitida la adopción a
Verónica Botero de la hija de
Ana Elisa Léiderman, su compañera sentimental.
La lucha de Ana empezó en 2010 cuando el caso llegó a la Corte Constitucional, luego de ganar una tutela fallada doblemente a favor, pero cuya revisión fue solicitada por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf).
En entrevista concedida al politólogo de Eafit,
Leonardo García Jaramillo, Léiderman argumentaba que había una desprotección: "El Estado me está obligando a ser mamá soltera porque no me permite escoger con quien voy a criar a mis hijos, eso es una injusticia, y es una injusticia con los hijos porque los obliga a tener la protección de un adulto cuando pueden tener la protección de dos. Nosotros no estamos pidiendo privilegios".
El abogado del caso,
Germán Humberto Rincón Perfetti, aseguró a este diario que la decisión es histórica "porque se le da final a una injusticia. Muchas parejas del mismo sexo buscan la adopción conjunta, pero se les ha negado. Ahora, hay que llamar a la Procuraduría para que proteja los derechos humanos. Los enemigos de la adopción son los enemigos de la democracia, no se puede imponer la decisión de nadie sobre los grupos sociales".
Las reacciones
Antes de conocerse el fallo, el Centro Democrático había expresado su rechazo a un fallo positivo de la Corte Constitucional. "Nuestro Partido es respetuoso de la privacidad de las personas y reconoce los derechos civiles de las parejas del mismo sexo, pero defiende la protección de la familia, conformada por hombre y mujer, y el bienestar de la niñez con base en la normatividad vigente".
El procurador General,
Alejandro Ordóñez, advirtió que el fallo "tiene efectos respecto a las personas que estuvieron vinculadas al proceso, no tiene efectos de carácter general, no vincula a otros ciudadanos". Agregó que no ha estado de acuerdo con el tema porque "el ordenamiento jurídico señala que los derechos de los niños son prevalentes, por lo que ellos tienen derecho como consecuencia a tener mamá y papá".
No obstante, el abogado Rincón acotó que este es un primer paso para que la brecha se abra a favor de los derechos de las parejas del mismo sexo.
Quienes también apoyaron la decisión fueron la senadora de la Alianza Verde,
Claudia López, y su pareja sentimental,
la representante
Angélica Lozano. La senadora dijo que es un primer gran paso para alcanzar plenitud de igualdad para la comunidad Lgtbi: "Es un nuevo triunfo de una comunidad que ha tenido que pararse en las escaleras de la Corte para lograr la protección que no les ha dado el Congreso".
En la otra orilla, representantes de la fundación heterosexual Hombre y Mujer manifestaron su desacuerdo por considerar que no se están protegiendo los derechos de los niños y añadieron que "por vía de tutela no podía concederse o considerarse una adopción ya que eso es materia del Congreso. Una familia solo se compone de un hombre y una mujer".