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Diez p.m. La noche se tragó el río en El Amparo, Venezuela, y la música llanera de Juan Farfán resuena hasta el malecón de la ciudad de Arauca. Los faroles alumbran las estatuas de Simón Bolívar, Fidel Castro, El ‘Che’ Guevara y Hugo Chávez. Los canoeros, ribereños y traficantes; la Guardia Venezolana, los llaneros y los niños caminan de arriba abajo. Todo lo veo, a menos de 50 metros, en suelo colombiano.
Diego*, uno de los taxistas de la zona, prende su Chevrolet Spark y se despide. Cruza el puente José Antonio Páez y ni la Policía ni la Guardia lo requisan; recoge a cuatro prostitutas venezolanas. A los 10 minutos está devuelta, enciende las luces cuando llega al Malecón, pita, y sigue su camino hasta La Curva donde la rumba termina, muchas veces, en euforias y puñales. Allí descarga a las mujeres y se las deja a uno de los cientos de contratistas que pululan en esta región de oro negro, ganado criollo, llaneros y guerrilla.
Como lobos en guardia y asustados, los marinos se escudan en bultos de arena. Fijan su mirada en el río, en El Amparo, el Malecón, en las sombras y en todo lo que se mueva. "Con esta calma todo es más peligroso, el terrorismo salta por todos lados", me dice el militar. Cuenta que al frente, en sus narices, está el Eln y que desde allá llegan en bote como si nada. "Pasan el río y un día nos tiran una granada, a los 15 días vuelven y nos disparan desde una moto. Uno sabe que vienen de allá. Al otro día se ven vestidos de civil en El Amparo".
Noviembre 7. Son las 11 de la mañana y regreso a la rivera. Al río no le caben las canoas que transportan desde Venezuela arroz, aceite, carne y pimpinas de gasolina que son pedidas por encargo en Arauca. Todo es más barato en el país vecino, un solo galón vale 4.000 pesos. Bajo las escalas y le pido a un canoero que me lleve a El Amparo. Cruzo la frontera.
Los bolivarianos
Al sonido del motor, dejo atrás la estela de espuma en este paso cultural, que los subversivos usan desde antaño para sacar hombres heridos, atacar en la noche y eludir la persecución de las autoridades colombianas.
Primero fue el Eln, que en los 70 llegó con el Domingo Laín: El movimiento de liberación nacional hizo con la industria petrolera su chequera y con los sindicatos el capital político. Luego vino Germán Briceño Suárez o "Grannobles". En el sur del país agarró con sus manos un ramal del Bloque Oriental y se lo trajo al piedemonte, la llanura y el río.
Para la guerrilla, Arauca es su lugar de escampadero, incluso el general (r) Fernando Tapias llegó a decir que a este departamento lo único que le faltaba era una bandera y un himno subversivo.
Pero después de El Caguán se les vino encima el diluvio de plomo. Las Farc se recostaron en las montañas y en la llanura selvática, y el Eln cruzó la frontera. En Venezuela, según Inteligencia Militar, tienen sus principales campamentos y desde allá extorsionan a todos los comerciantes y ganaderos de Arauca.
Cada fin de mes, denuncia Inteligencia de la Policía, araucanos cruzan el río y llegan a El Amparo, La Victoria y El Nula para pagar el diezmo. "Eso es lo que tienen que pagar, puede ser entre 10 millones o más cada mes, eso de pende de la persona. El Amparo se llena de colombianos y en esos días hay mucha fiesta en la frontera", asegura un investigador de Inteligencia Militar. A este paso se le conoce como una de las zonas de integración fronteriza entre los dos países pero no hay Policía que detenga la extorsión, no hay Guardia que capture a los guerrilleros.
Leo*, un viejo canoero de la frontera, afirma que desde que tiene memoria los productos venezolanos y colombianos van y vienen de un lado a otro. "Lo nuevo de hace unos años es que por allá están ellos (guerrilla) y esto se ha vuelto peligroso".
Las casas y calles de El Amparo son distintas a las de Arauca. Los mismos que ayer durmieron en el Malecón ahora reciben el sol en Venezuela. Una junta bolivariana, tres hombres con gorras rojas, coordinan los arreglos de un jarillón. En las calles deambulan descalzos los niños, en los postes hay pendones con el rostro del presidente Chávez. La guardia vigila las esquinas, en uno de los camiones militares llevan cinco colchones y bolsas de colores. Más allá hay un supermercado, más acá un puesto para el intercambio de pesos por bolívares. En una tienda espero, me observan.
En Arauca, hace tan solo dos días, guerrilleros lanzaron una granada a una ferretería, ubicada a solo 5 metros de la casa del gobernador José Facundo Castillo. Nadie resultó herido. Para el coronel Wilson Bravo Córdoba, comandante de la Policía de Arauca, todo apunta a que fueron las Farc, incluso capturó a cuatro personas sindicadas como las responsables.
Pero los periodistas de la zona dudan y dicen que detrás la explosión están las milicias del Eln que vienen de El Amparo, La Victoria y El Nula del estado de Apure. "Corren, saltan y huyen", dice uno de los comunicadores que prefiere omitir su nombre.
Tras "Pablito"
El 16 julio de 2010 tres periodistas se atrevieron a cruzar la frontera para buscar al máximo jefe del Eln en esta región, Gustavo Aníbal Giraldo Quinchía, alias "Pablito". Recluido en la cárcel de Arauca, el 8 de octubre de 2009 se escapó gracias a una acción tipo comando de esta guerrilla, que entró al penal, asesinó a un guardia del Inpec y sacó a "Pablito" en motocicleta hasta el Malecón y en bote lo condujo a El Amparo.
Las autoridades colombianas denunciaron la presencia de "Pablito" en EL Nula, a 30 kilómetros de Saravena. Y hasta allá llegaron Philip Moreno, Paola Osorio y Milton Uscátegui. Como reporteros preguntaron por el jefe guerrillero pero la Guardia los cercó, los capturó, los señaló de espionaje y los condujo hasta Caracas. Tres días después fueron deportados a Arauca.
En El Amparo, mientras se acercan dos uniformados, me levanto de donde estoy, busco las estatuas, por ningún lado veo la de "Tirofijo" o la del "Mono Jojoy", que habían sido instaladas por los bolivarianos, según el gobierno colombiano. Le digo a Leo que regresemos cuanto antes a Arauca, prende el motor de la canoa.
El "Rompellano"
En la ciudad petrolera cuando llega la tarde no se hace nada. Por el sopor no hay carros, los almacenes están cerrados, solo se ven las patrullas de la Policía que hacen su parada en las esquinas. En el Tribunal Superior de Arauca me encuentro con el alcalde Luis Emilio Tovar. Entre otras cosas dice: "La frontera con Venezuela sigue siendo un problema grave. Siguen en la frontera, tienen la posibilidad de pasar de un lado a otro y en cierta manera ha sido repetitivo que en los últimos ataques haya ocurrido eso".
Con un mapa del municipio señala los puntos de Matacandelas, El Frente, El Paso de la Canoa y Barrancones como los lugares que el Eln utiliza, y de vez en cuando las Farc, para entrar a Colombia o para refugiare en el país vecino.
Es inveterado la presencia guerrillera en la llanura. Es descomunal el culto que los 90.000 habitantes del municipio de Arauca le rinden a la tumba del guerrillero liberal "Rompellano". Su nombre de pila era Eduardo Fernández, montado en su caballo recorrió el Meta hasta Arauca y con Guadalupe Salcedo, hombro a hombro, crearon la guerrilla liberal de los Llanos Orientales.
El 19 de septiembre de 1953, después de ser indultado por el general Rojas Pinilla, de Tame llegó a Arauca. Bebió esa noche en el pueblo, la gente lo saludaba, lo quería. Pero amaneció muerto de varios balazos. Cuenta el mito araucano que esa noche nadie se atrevió a recoger su cadáver. En la mañana la lluvia le lavó su cuerpo y más tarde fue a dar al cementerio.
Así dice la canción de Juan Farfán que resuena en estos días de fiesta en el Malecón y en El Amparo: "Rompellano fue guerrillero unos tiempos pero olvidó ese camino, después fue un hombre de bien, compañero y buen amigo (...) Cuando murió hasta lloraron los niños, el mundo se cerró en lluvia, hubieron (sic) truenos seguidos, todo mundo lo visita con amor y con cariño por lo bueno y milagroso con el campesino".
4 p.m. El cementerio de Arauca es una arrume de fosas, lápidas y sepulturas sin nombre. En la tumba de "Rompellano" hay dos araucanos que le rezan con fervor, le prenden tres veladoras. Sobre la loza hay girasoles y decenas de placas incrustadas en las baldosas. Una de ellas dice: "Gracias por el favor recibido, Dr. Rompellano".
Omega en Puerto Jordán
En el municipio de Tame hay una población que fundó "Grannobles". Conocida por sus habitantes como Puerto Jordán, las Farc la bautizaron Pueblo Nuevo y este, desde hace un año, es el centro de operaciones de la Fuerza de Tarea Conjunta Quirón de las Fuerzas Armadas.
Noviembre 8. Son las 10 de la mañana y el calor y la humedad empapan de sudor los uniformes de los soldados que vigilan la carretera que de Arauca conduce a Puerto Jordán.
En la vereda Las Tres Cruces de Arauquita, por esa misma vía, el frente 10 de las Farc asesinó a 10 soldados y un oficial el pasado 17 de mayo. Cuadro días después vino la respuesta de la Fuerza de Tarea Conjunta. En el centro del departamento fue bombardeado el campamento madre del frente 10: murieron 33 guerrilleros y fue capturado "Misael", cabecilla de esa estructura.
En Puerto Jordán, donde están las milicias de las Farc, hay un soldado en cada cuadra. Las requisas son diarias, las quejas contra los soldados también. La base de la Quirón está a 100 metros de la población y desde aquí las Fuerzas Militares han logrado que las Farc se muevan de sus áreas bases: De Galaxias, Normandía, Tembladores, Caño Azul, Bocasdelele, Filipinas y el Burón.
Cuenta el general Carlos Rubiano Fonseca que en un año han debilitado en un 50 por ciento a las Farc. Que los operativos acabaron con la columna móvil Reinel Méndez, que el frente 38 tiene solo ocho combatientes. Que los frentes 45 y 28 están aislados. Que supo de "Grannobles" hace dos meses y que estaba en Venezuela, que a las Farc solo le quedan 160 hombres en Arauca, los mismos que tiene el Eln recostados sobre la frontera.
Pero alias "Rafael", comandante del ABC de las Farc (de las estructuras que se asientan en Arauca, Boyacá y Casanare) se refugia en Elorza, Apure. Los últimos informes de Inteligencia Militar así lo señalan.
"La frontera es excesivamente grande y porosa. Nosotros no podemos negar que es muy permeable por donde usted la quiera mirar. Por el río, en cualquier sitio, se pueden pasar" afirma el general Rubiano.
5 p.m. En Arauca está el pozo petrolero de Caño Limón, lo explotan la OXY y Ecopetrol. En sus llanuras se crían y alimentan un millón 90.000 reses, según la secretaria de Agricultura. Al año el departamento recibe 150.000 millones de pesos por regalías pero los 247.000 habitantes solo disponen de un hospital principal que se cae a pedazos.
En el extremo más oriental de Colombia cuando la guerrilla tumba una torre de interconexión eléctrica, medio territorio se queda sin luz. En Arauca, la segunda región ganadera del país, la tercera en petróleo, la presencia de la guerrilla no acaba. Un día bajan de Venezuela y atacan. Al otro retornan a las llanuras del país vecino y se escampan. El rumor del río lo sabe todo, de la corrupción y otros males. De los llaneros y llaneras, que a veces no ven ninguna línea de frontera, solo su madre región que se disputan los armados.