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La delegación de la Corte Penal Internacional (CPI) llegó ayer a Colombia, visita que cobra relevancia por el proceso de paz que lleva el Gobierno con las Farc en La Habana.
La primera reunión que tuvo la delegación ayer, después de su arribo al país, fue con el Alto Comisionado para la Paz,
Sergio Jaramillo.
Allí, el Comisionado dijo a los delegados —
Emeric Rogie r, jefe de la sección de Análisis de Situaciones;
Eugenia Valenzuela y
Daniel Ulme — que el objetivo del proceso de paz es la terminación del conflicto como garantía de no repetición de la violencia y llevar a la protección de "los derechos humanos"; además del "compromiso del Gobierno con lograr la máxima satisfacción de los derechos de las víctimas en el marco de sus obligaciones internacionales".
La CPI ratificó el apoyo al proceso de paz, aunque, al tiempo, reiteró las "obligaciones que contempla el Estatuto de Roma en materia de investigación y enjuiciamiento de los crímenes internacionales".
La Corte Penal Internacional viene a revisar casos como la Ley de Justicia y Paz, la parapolítica, los "falsos-positivos" y procesos en los que se culpa a la guerrilla; y no solo eso, el congresista
Iván Cepeda aseguró que, personalmente, preguntará por las denuncias que hizo en diciembre en contra del expresidente
Álvaro Uribe Vélez por el caso de las "chuzadas del DAS", para lo cual allegó documentación.
Aunque el expresidente en reiteradas ocasiones ha negado tales afirmaciones y en enero de este año dijo que el Congresista se reúne con "ex paras" para hacer planes en su contra. Por ahora la Corte tiene la última palabra.