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El clamor al Gobierno y las Farc para acelerar los diálogos y concretar acuerdos comienza a tener respuestas este fin de semana en Cuba, con la puesta en marcha de la subcomisión que estudiará cómo terminar el conflicto armado con esa guerrilla.
Este viernes altos oficiales de las Fuerzas Militares viajan a Cuba en representación de las Fuerzas Militares, quienes revisarán temas complejos para conseguir cerrar con éxito la negociación, como el cese el fuego, la desmovilización de guerrilleros y la dejación de armas.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, anunció ayer en la Comisión de paz del Congreso que irán tres coroneles: Uno del Ejército, otro de la Fuerza Aérea y uno de la Policía; y un Almirante de la Armada.
La subcomisión estará conformada por hasta 10 miembros de cada delegación, que revisarán en principio experiencias nacionales e internacionales sobre terminación de hostilidades y reintegración de combatientes. De hecho, la ratificación ayer de la cúpula militar y la Policía confirma la estrategia del Gobierno de mantener la ofensiva militar contra los grupos ilegales. Al mismo tiempo, respaldar al Gobierno en su objetivo de negociar el fin del conflicto y hacer la transición al posconflicto si tienen éxito los procesos de paz con las guerrillas.
Así lo interpreta el general retirado de la Policía Jairo Delgado, director de análisis del Instituto de Ciencia Política Hernán Echavarría Olózaga.
"La participación directa de oficiales activos tiene objetivos políticos y técnicos. El Gobierno quiere compartir el compromiso político de negociar con la guerrilla y que esta constate que hay garantías para su desmovilización y dejación de armas". El analista en seguridad y defensa advierte que "será equivocado negociar la estructura de las Fuerzas Militares en esta etapa del proceso de paz, cuando la insurgencia habla de dejación y no de entrega de armas y hay retos en seguridad como el crimen organizado, bandas criminales, el narcotráfico y la seguridad ciudadana".
Según el ministro de Defensa hay un proceso de "transición" en las Fuerzas Armadas que debe "facilitar que los desmovilizados se reintegren a la vida civil como establezca el pueblo colombiano".
La decisión de abordar de forma paralela a la discusión sobre víctimas el fin del conflicto busca acelerar las negociaciones, ha explicado León Valencia, analista del conflicto. Para el director de la Fundación Paz y Reconciliación "es positivo que comience esta subcomisión para agilizar, porque negociar mientras continua el conflicto, sin un cese el fuego, crea desconfianza frente a los diálogos".