viernes
7 y 9
7 y 9
La anunciada tregua entre las facciones de "La Oficina" que se enfrentaban en Medellín y el Valle de Aburrá "continuará de manera indefinida", según un comunicado conocido por este diario, de Maximiliano Bonilla, alias "Valenciano" y Érick Vargas, alias "Sebastián".
El texto confirma el fin del enfrentamiento entre ambos jefes de grupos al margen de la ley, que controlan la mayoría de unos 140 combos delincuenciales que existen en Medellín, a los que las autoridades atribuyen el alto índice de homicidios en la ciudad que se presenta desde el año pasado.
"Nos satisface el hecho de poder informar públicamente la terminación de las hostilidades entre nosotros y pedimos el apoyo de la población, con la esperanza de que podamos, en un futuro cercano retomar los canales de la civilidad y la democracia", señala el comunicado. Es la primera vez que ambos jefes de las facciones de la denomina banda "La Oficina" se refieren a la tregua que comenzaría a operar a principios de este mes.
Los integrantes de la Comisión por la Vida, conformada en octubre del año pasado para buscar acercamientos entre los jefes de las bandas delincuenciales en Medellín, confirmaron la veracidad del comunicado.
Según Jorge Gaviria, uno de los miembros de la comisión civil, el comunicado confirma el pacto en un momento importante porque envía un mensaje claro a la ciudad y a los barrios. "Si bien la tregua fue anunciada a la ciudad, en algunos barrios había desinformación sobre si era temporal y ahora se confirma de que es indefinida".
Para Jaime Jaramillo Panesso, otro miembro de la comisión que logró el acercamiento entre alias "Sebastián" y "Valenciano", la confirmación de "esta tregua es importante en defensa de la vida, para frenar la ola de homicidios sin ir en contra de la institucionalidad ni la ley".
El pacto se logró, por mediación de la comisión civil, en reuniones realizadas entre noviembre y enero con personas detenidas en diferentes cárceles, señaladas de pertenecer a "La Oficina", como José Leonardo Muñoz Martínez, alias "Douglas"; Hernán Darío Giraldo Gaviria, alias "Cesarín"; Fabio Acevedo y Elkin Triana.
Los pro y los contra
El personero de Medellín, Jairo Herrán Vargas, consultado sobre este comunicado, manifestó que "como pacto de no agresión es positivo para la ciudad si pone fin a las confrontaciones y asesinatos que tienen atemorizada muchas comunidades".
En efecto, uno de los primeros hechos atribuidos a este pacto sería la reducción de homicidios. Mientras en la última semana de enero se registraron 48 homicidios, en los primeros ocho días de febrero la cifra fue de 23.
El Personero advirtió que el pacto tiene su lado negativo. "El pacto que se conoce solo apunta a detener la disputa entre ellos y los homicidios, pero estos grupos son responsables de extorsiones, desplazamientos, expendios de alucinógenos y otras violaciones a derechos humanos que se mantienen. Uno teme que ahora, sin confrontación, se afiancen en sus zonas con prácticas delictivas, por lo que el Estado debe buscar su sometimiento a la justicia".
Desde que se anunció la tregua hace 10 días, se generó un debate por el alcance del pacto que condujo a que el Gobierno suspendiera la autorización a la comisión civil para continuar su mediación.
El Alto Comisionado para la Paz, Frank Pearl, justificó esa decisión en que los acercamientos se avalaron "con la condición de no desistir en la lucha contra la criminalidad y que la única finalidad era ofrecer garantías para el sometimiento a la justicia".
El Alcalde de Medellín señaló entonces que no avaló el pacto porque "el contacto con jefes de organizaciones criminales no está dentro de las posibilidades legales".
Este diario buscó la opinión de los altos mandos policiales, aunque no se conoció la reacción. Cabe recordar que, en su momento, esta institución, a través de sus oficiales, señaló que la misión es derrotar a la delincuencia.