Contrario a lo que cualquier persona podría pensar de una diplomática del Viejo Continente, la holandesa
María Antonia Van Gool (Tilburg, 7 de marzo de 1952), embajadora de la Unión Europea en Colombia, es una persona cálida, amable, con buen toque colombiano.
La señora Van Gool visitó el Oriente antioqueño, observando junto con representantes de Portugal, Italia y Rumania los avances de procesos claves para la paz como el de restitución de tierras y la reintegración de excombatientes a la civilidad. Quedó impresionada con los avances de Antioquia y prevé ayudar en muchos otros asuntos de desarrollo. El Colombiano habló con ella sobre temas de impacto regional, nacional e internacional.
¿Es optimista respecto a la exención del visado Schengen para los colombianos?
"El proceso va bastante bien. Hay desde hace un mes ya un acuerdo político entre los estados, que era lo más difícil. Lo que queda es una serie de pasos jurídicos y administrativos, que van a tomar tiempo. Para calcular ese tiempo, tenemos que pensar que el Parlamento Europeo va a tener que aprobar otras cosas, y vamos a seguir teniendo negociaciones entre la UE y Colombia acerca de su implementación. Yo calculo que todo esto tomará un año. Quizás se podría adelantar la exención pero hasta octubre no se sabrá esto".
¿Qué mérito tiene Colombia para esta exención?
"Colombia progresó notablemente. Su mérito más importante es que está abierta a discutir sus problemas, porque ningún país es perfecto. Nosotros tampoco. Con Colombia se puede hablar de desigualdad, de derechos humanos, de conflicto, hay apertura a muchas cosas que el país quiere solucionar. La UE considera que Colombia es un jugador clave en la región. Primero por su actividad de "outreach", de hacerse conocer, también por el papel que juega. Tiene coraje, no es fácil su rol, es un líder que no pasa desapercibido".
¿Cómo se unió a la UE y por qué decidió trabajar en Colombia?
"Esta es mi segunda estadía en el país. Ya había venido entre el 79 y el 83, antes de la época más difícil para Colombia. En ese tiempo era diplomática de Holanda. Conocí mucho la nación, cómo era. Viajé al Urabá, al Chocó, Guaviare y Cauca. Regiones que han sufrido por el conflicto, pero que mejoraron bastante. Seguí mi carrera diplomática con Holanda. Hace dos años mi país me prestó, por así decirlo, a la UE y pude regresar. Quiero mucho al país, me parece sumamente bonito. He estado en hartas naciones, pero Colombia es única. No se todavía cuál región es mejor (risas), no me decido".
¿En qué consistió su visita al Oriente antioqueño?
"Vinimos con los embajadores de Portugal, Rumania e Italia. Estuvimos en Santuario viendo en qué consisten los planes de desarrollo y paz. También nos reunimos con la Agencia colombiana para la Reintegración, hablamos con desmovilizados. Conocimos sus vidas, sus desafíos, a qué han llegado. Vimos muchas historias exitosas, a pesar de las dificultades. Ya todo esto lo sabemos porque la UE financia estos programas. También vimos las actividades y estudiamos la economía antioqueña, viendo qué retos tiene la región y si podemos asesorar".
¿Cómo ve la situación en Venezuela?
"Lamentamos mucho lo que pasa en dicho país por la violencia, nos entristecen las víctimas, y, mucho más, nos indigna la situación de la libertad de prensa. Para nosotros en Europa es muy importante eso: la libertad de expresarse, las libertades políticas".
¿Qué opina de lo que dijo la secretaria de Estado adjunta de E.U. para Ucrania: "que se joda la UE"?
"Tenemos unas relaciones de mucha historia y de mucha trayectoria. Ellos nos han ayudado durante y después de la Segunda Guerra Mundial. Esta gente habla entre sí, pero nuestras relaciones seguirán siendo muy buenas".
¿Qué papel juega Europa en las negociaciones nucleares de Irán y para la paz en Siria?
"Somos parte del grupo de tres en las de Irán, con China y E.U. Hemos logrado avances muy importantes, que ustedes conocen: Irán no continuará su enriquecimiento de Uranio, y destruirá parte del ya enriquecido. En Siria, no con tanto éxito todavía, como en Irán, intentamos mediar en lo que se pueda. Condenamos la violencia contra la población".
¿Le parece que Medellín es la ciudad más innovadora del mundo?
"Yo voté por Internet (risas). No conozco todas las ciudades del mundo, pero creo que Medellín ha hecho un esfuerzo considerable y, por lo tanto, merece dicho reconocimiento internacional".