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Aprovechan la luz del sol y disminuyen el consumo de electricidad, reutilizan las aguas lluvias para usos sanitarios y de riegos, le apuestan a la ventilación natural y suprimen el aire acondicionado. Además, construyen más parqueaderos de bicicletas y menos de automóviles y, algunos, le apuntan a las fachadas vegetales.
Así son los edificios Verdes de Medellín, estructuras que ya encontraron cómo defenderse ante los cambios climáticos y cómo ser sostenibles en el tiempo.
Para Jorge Hernán Salazar, docente de Arquitectura de la Universidad Nacional, las variables que determinan si un proyecto verde es o no viable, están determinadas por el lugar, el bienestar humano y la eficiencia energética.
Alejandro Echeverri , director del Centro de Estudios Urbanísticos y Ambientales (Urbam), indica que para las características climáticas de Antioquia (de trópico sin estaciones) es importante contar con estructuras sostenibles.
La Universidad Eafit, Ruta N, Bancolombia e Isagen le apostaron a las edificaciones verdes de alta calidad ambiental , y están certificados por LEED, un sistema internacional que verifica su desempeño mediombiental.
Mayor Inversión
Las construcciones fueron más costosas de lo que sería un edificio común, pero, gracias al ahorro en servicios públicos que obtendrán con la apuesta verde, la tasa de retorno será rápida.
Salazar advierte que todavía hay "ineficiencias feroces" para construir una ciudad sostenible. En vivienda, por ejemplo, los ciudadanos aún no están preparados para invertir en sostenibilidad.
Echeverri, por su parte, resalta que educar a la ciudadanía es la forma más ágil de lograr el prometido de alta calidad ambiental para Medellín.
1. EAFit vistió de verde su escuela de ingenierías
Al caminar frente a su fachada se puede ver una estructura de color verde rodeada por enredaderas que ayudan a la regulación del clima en los cinco niveles del edificio por medio de un proceso bioclimático que rompe los rayos del sol. Su inversión fue de 13.500 millones de pesos.
La iniciativa que combina con el concepto de la institución: Eafit, universidad parque, tiene 8.200 metros cuadrados y cuenta con un sistema de recolección de aguas lluvia, iluminación eléctrica de bajo consumo y flujos de aire que evitan el uso de aire acondicionado.
"Con este concepto economizamos y dejamos de hacer emisiones de co2. Además somos responsables con el medio ambiente", dice Juan Fernando Forero, arquitecto del proyecto.
El edificio de ingenierías de la Universidad Eafit, fue el primer la primera estructura verde de Antioquia.
2. En ruta n la innovación es sostenible en el tiempo
En suelo urbano y cerca a dos estaciones del Metro (Hospital y Universidad), está el primer edificio sostenible y público de la ciudad. Ruta N es el centro de Innovación y Negocios de Medellín.
Según Paulina Villa, arquitecta del proyecto, " la temática del edificio no daba otra cosa que no fuera verde. La innovación no contempla que lo que se haga no sea sostenible".
Por eso, la edificación está diseñada para desincentivar el uso del transporte particular. Cuenta con 140 parqueaderos, para 1.700 personas.
Además, le apunta a mejorar el uso energético en un 20 por ciento, por medio de sensores que determinan cuándo es necesaria la luz artificial. Frente a la reutilización de aguas lluvias el prometido es reducir el consumo del servicio en un 39 por ciento.
El edificio tendrá 402 metros cuadrados de cubierta verde.
3. Bancolombia tiene un compromiso ambiental
Ecológico y rodeado de espacios verdes, es el nuevo edificio del Grupo Bancolombia. La entidad conjuga la economía y el medio ambiente y le apostó a mejorar la movilidad.
La estructura de 135 mil metros cuadrados, tiene 900 parqueaderos para visitantes y empleados, cantidad muy baja para un complejo de su tamaño, así motiva a la ciudadanía a que utilice el transporte público.
Tiene ascensores con inteligencia neuronal que consumen poca energía, vidrios con protección solar para disminuir el consumo de aire acondicionado y mecanismos para la protección de la emisión de gases, y sistemas de reutilización de aguas lluvias.
El proyecto necesitó una inversión de más de 365 mil millones de pesos y fue diseñado tanto adentro como afuera, para que los ciudadanos vivieran un espacio verde en medio de un sector industrial.
4. La nueva estructura de isagen ya pinta verde
Desde su proceso de construcción el edificio que la empresa AIA le arrendará Isagen, ya es responsable con el medio ambiente: utiliza madera de bosques certificados en protección de recursos naturales, y las pinturas, selladores, pegamentos y materiales para recubrimiento, son de baja emisión de compuestos orgánicos.
Según Luis Fernando Londoño Mejía, Gerente administrativo de Isagen, el edificio es consecuente con el servicio que ofrece la empresa: energía verde y contará con buenos sistemas de iluminación, puestos de trabajo que permiten la integración y evitan el sobrecalentamiento y espacios para almacenar el material reciclable.
La obra de 13 pisos y dos terrazas , estará terminada en octubre y cuenta con los estándares internacionales en sostenibilidad ambiental. Además, significará una gran inversión para el arrendatario, Isagen.