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Un total de quince niños de comunidades indígenas de La Guajira han muerto este año por enfermedades causadas por la falta de agua y alimento, informó este jueves la Defensoría del Pueblo.
La entidad, que pidió al Gobierno Nacional hacer una intervención humanitaria de emergencia, recordó que el año pasado murieron 23 menores por los mismas causas en ese departamento semiárido fronterizo con Venezuela, uno de los mas afectados por la grave sequía en la costa atlántica colombiana.
Según un comunicado de la Defensoría, en rancherías indígenas de los municipios de Uribia, Manaure y Riohacha, capital regional, hay además un alto número de niños desnutridos.
En Uribia han sido registrados 17.000 niños desnutridos, en Manaure 18.000 y en Riohacha, por lo menos 2.000.
La entidad agregó que en algunas zonas de esos municipios los reservorios de agua están secos, razón por la cual los habitantes se ven obligados a extraerla de pozos artesanales sin las condiciones mínimas de higiene.
La sequía y la desnutrición afectan también a los animales pues según los datos del organismo, en los últimos tres meses han muerto 7.000 cabezas de ganado en La Guajira y se calcula que la misma suerte ha corrido el 10 por ciento del rebaño de chivos, típicos de esa región.
Ante esta situación, la Defensoría del Pueblo solicitó al Gobierno Nacional y a las autoridades territoriales una intervención humanitaria de emergencia para que se diseñe y construya un sistema de pequeños embalses y reservorios de regulación hídrica.
Pidió además que se entreguen "kits" alimentarios de forma oportuna y sistemática a la población y que se instaure un programa de suplementos alimenticios que además de los pobladores cubra a los animales.