En un ejercicio de periodismo cívico, poniendo la mira en los alcaldes del Valle de Aburrá, El Colombiano les dio la palabra a los mandatarios locales para hablar de sus metas y logros y luego consultó a los ciudadanos para evaluar su gestión de 30 meses.
Este examen ante la opinión pública, exclusivo de El Colombiano y que se repetirá anualmente, permitió conocer la calificación que hacen de sus gestiones en aspectos prioritarios para el desarrollo de sus respectivos municipios y el mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes.
Es así como se pudo establecer que la seguridad, el empleo y la salud, y con menor incidencia la movilidad y el medio ambiente, son los más mal evaluados con relación a la gestión de sus mandatarios, según la encuesta contratada con la firma Invamer.
La evaluación más negativa en materia de seguridad (39 por ciento) la tiene el alcalde de Medellín,
Aníbal Gaviria, en un contexto de una fuerte criminalidad por el accionar de 239 bandas delincuenciales y fenómenos delictivos como el microtráfico, la extorsión y los delitos contra el patrimonio. En esta percepción negativa le siguen en su orden Envigado (36), Girardota (33), Barbosa (31) y Caldas (24).
El empleo que se identifica como el segundo aspecto más negativo que tienen en común los alcaldes del Valle de Aburrá, que es por mucho la subregión de Antioquia que mejores condiciones de vida ofrece a sus habitantes, el municipio que obtiene la mayor desaprobación es Bello (32 por ciento), seguido en su orden por Caldas (25) Girardota (24) e Itagüí (16).
Una mirada general a las problemáticas comunes del Área Metropolitana del Valle de Aburrá, en correlación con la gestión de los alcaldes, muestra que en Salud, la mayor aprobación la tiene el alcalde de Copacabana; en generación de Empleo se destacan por igual Medellín, Caldas y Girardota; en gestión ambiental, Sabaneta; en Movilidad la más alta aprobación la tiene el alcalde de La Estrella; en Recreación y Deporte el de Copacabana; en Infraestructura el de La Estrella; en Cultura el burgomaestre de Bello y el de Itagüí obtienen las mayores aprobaciones en Educación y Seguridad.
Curiosamente, en Sabaneta, destacado por el gobernador
Sergio Fajardo como "el municipio que tiene de lejos las mejores condiciones de vida de todo el departamento", sus habitantes le dan una baja calificación, reconociendo solo el trabajo en materia de infraestructura, no así en movilidad.
En materia de educación, que ha sido una de las banderas de la administración departamental, y como lo dijo el gobernador Fajardo a propósito de esta evaluación de los mandatarios, "si no hay una educación de calidad, la riqueza entra y sale y la pobreza queda", la aprobación a la gestión de los alcaldes ronda apenas un 12 por ciento.
Este ejercicio exclusivo de El Colombiano de escuchar a los 10 alcaldes y encuestar a la comunidad sobre las inquietudes frente a su gestión nos hace pensar que se trata de una manera juiciosa y constructiva de contribuir, desde el periodismo, a la solución de las problemáticas del área central del Departamento.
Y más allá de la aprobación promedio del 3,6 obtenida por los alcaldes, que resulta regular en términos estadísticos, preocupa que algunos municipios presenten retrocesos frente a los grandes retos que deben asumir y que solo el alcalde de La Estrella, J
uan Diego Echavarría Sánchez, obtenga un nivel de aprobación satisfactorio, por encima de cuatro (4,41) y los habitantes de este municipio se muestren como los más optimistas en torno a su futuro inmediato (93 por ciento).
Contraposición LA MIRADA DE LOS CIUDADANOS A SUS ALCALDES NO RESULTA MUY BENEVOLENTE
Por JORGE GIRALDO RAMÍREZ
Decano Escuela de Ciencias y Humanidades de EAFIT.
Desde el punto de vista sociológico, el área metropolitana de Medellín es una sola ciudad con 10 alcaldes, donde la ciudad de Medellín representa cerca de las tres cuartas partes de la población y seguramente un porcentaje similar en cuanto a capacidades institucionales. Tener 10 administraciones supone un reto muy grande de coordinación que va mucho más allá del que se dotó a la ciudad como es el Área Metropolitana.
En cuanto al resultado de este ejercicio encuentro dos cosas preocupantes: los municipios cuyos alcaldes resultan peor calificados son a su vez los más poblados del Valle de Aburrá (Medellín, Bello, Envigado, que concentran tres millones de habitantes). Y hay un dato muy notorio en el cambio de tendencia que se da en el sur. Estábamos habituados a que los municipios de la banda oriental del sur del Valle tuvieran mejores desempeños. Me parece una grata noticia que La Estrella e Itagüí sean ahora los municipios punteros.
Solo hay un alcalde con una calificación por encima de cuatro y me parece que el resultado coincide con la percepción de lo que está pasando en las administraciones del Valle de Aburrá y si se pone en un contexto histórico se encuentran datos preocupantes, como el caso de Envigado. Su calificación es muy baja frente a lo que ha sido la tradición. En el caso de Envigado y Medellín hay luces amarillas. Y en Sabaneta la situación es más preocupante pues la ciudadanía le está pasando una factura de cobro al crecimiento acelerado y desordenado que ha afectado la calidad de vida de sus habitantes.