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Los trabajadores de la petrolera canadiense Pacific Rubiales Energy iniciaron este martes un paro de actividades al declararse en asambleas permanentes en los campos de Quifa y Pirirí, en los Llanos Orientales, en señal de protesta por 500 despidos.
La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) y la Unión Sindical Obrera (USO) informaron a través de un comunicado de la decisión de los trabajadores afiliados después de que el pasado viernes la multinacional abandonara la mesa de negociación "y diera inicio al despido de más de 500 trabajadores, a partir del día de hoy".
"Los trabajadores organizados en la USO decidieron ejercer el derecho constitucional de la protesta para hacer valer sus derechos y responder a la actitud tramposa e irrespetuosa de la multinacional Pacific Rubiales, Ecopetrol y el Gobierno nacional", señaló el comunicado.
Según estos sindicatos, tanto Pacific Rubiales como el Gobierno "desconocieron el acuerdo" al que se había llegado con la USO en referencia a mejoras salariales y de condiciones laborales para contratistas y subcontratistas.
En este pacto se reconocía "una escala salarial mensual incluyendo un salario básico, una prima de campo y dos horas de transporte diario" que diferenciara entre técnicos y tecnólogos.
Los campos de la compañía vienen registrando protestas y alteraciones desde mediados de julio, por las que reclaman mejoras de prestaciones y de vida en los campamentos.
Las partes trataron de acercar posiciones encaminadas a alcanzar un acuerdo, aunque hasta el momento no se ha consolidado, pues, según los sindicatos, desde el inicio la empresa petrolera "ha actuado de forma deshonesta, dilatando la negociación".
Asimismo, denuncian que Pacific Rubiales está propiciando e incluso forzando a los trabajadores para que se afilien a otro sindicato patronal llamado UTEN (Unión de Trabajadores de la Industria Energética Nacional), afiliada a la Confederación General del Trabajo (CGT).
Los firmantes rechazaron que la USO y sus afiliados persigan a la Uten y CGT, como denuncian estos dos sindicatos.
"La declaratoria en asamblea permanente de los trabajadores es la más clara muestra de unidad por la defensa de sus derechos", concluyó el comunicado.
Unos 12.000 trabajadores directos e indirectos están vinculados con la multinacional en Puerto Gaitán, región en la que la multinacional extrae a diario unos 225.000 barriles de petróleo, la cuarta parte de la producción nacional.