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El primer encuentro entre el segundo grupo de víctimas y las delegaciones de las Farc y el Gobierno, estuvo marcado por el simbolismo que le imprimieron los afectados por los grupos armados a la reunión, hecha a puerta cerrada.
Las víctimas entregaron la luz a cada una de las partes negociadoras para que "iluminara los corazones de los que buscan la paz para el país, hostigado por las acciones armadas durante más de 50 años de confrontación".
Fue así como María Chole Toro entregó el velón encendido a Seuxis Paucias Hernández, alias "Jesús Santrich", integrante de la comisión negociadora de las Farc, y Gloria Gómez hizo lo propio con los delegados de los países garantes como agradecimiento por el acompañamiento al proceso.
Luego de la ceremonia, las víctimas pidieron el respeto por sus derechos, además que se mantenga la paz como bandera. Hubo una petición en común: cese el fuego bilateral.
"La justicia parte de un mecanismo que garantice la no repetición, que se reconozca el daño ocasionado, el impacto en cada una de las víctimas", precisó Gloria Gómez, una de las víctimas.
Hablaron por 15 minutos
Un cuarto de hora fue el tiempo que cada una de las víctimas del conflicto armado tuvo ayer en la mesa de diálogos para expresar su situación frente a las delegaciones del Gobierno y las Farc.
En este lapso, los 12 afectados por los distintos grupos armados que llegaron el martes a Cuba contaron cómo se convirtieron en víctimas; hablaron de perdón, reconciliación y de su disposición para acoger el proceso de paz llevándolo a cada una de las regiones en las que viven.
En primer lugar las Farc indicaron a las víctimas que el encuentro con ellas es una "muestra evidente de que la paz y la reconciliación no tienen marcha atrás" y aseveraron que desde la mesa de conversaciones se está construyendo y se van ofrecer alternativas a las problemáticas expresadas en cada visita.
"Queremos en esta ocasión darles nuestro saludo de bienvenida a todos y a todas, abriendo nuestros corazones, de manera especial hacia quienes hacen parte del grupo de víctimas", dijo la guerrilla.
El Gobierno, por su parte, manifestó que con la presencia de las víctimas se buscará "valorar todos los patrones de victimización", y expresó que quieren escuchar a aquellas que aún no están de acuerdo con el proceso de paz.