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La meta del Gobierno es que al cierre del año haya 280.000 trabajadores colombianos con ingresos menores a un salario mínimo e inscritos en los niveles I, II y III del Sisbén ahorrando en el programa de Beneficios Económicos Periódicos (Beps), que ya está en marcha y el presidente Juan Manuel Santos lanzará en mayo.
La iniciativa concebida desde 2005 y que lleva dos años de puesta a punto busca asegurar un ingreso para la vejez para quienes no alcancen a tener una pensión y contempla un aporte de 20 por ciento, proporcional al ahorro efectuado, al llegar a la edad de jubilación (57 años para mujeres y 62 para hombres).
Colpensiones, la administradora del régimen público de Prima Media, es la encargada del manejo de los Beps, en que ya se han inscrito 20.000 personas en 14 municipios del país, con la meta de alcanzar 250.000 ahorradores este año y 1,28 millones para 2018.
En Antioquia se han vinculado 1.642 ciudadanos y habilitado tres puntos de atención en alianza con cajas de compensación y la Alcaldía de Medellín. Esta semana se realizará el lanzamiento de Beps en Bello y próximamente se espera llegar a Apartadó, Turbo (Urabá antioqueño) y Quibdó (Chocó).
El presidente de la entidad, Mauricio Olivera González, explicó a EL COLOMBIANO que se está a punto de firmar un convenio con la Federación Nacional de Cafeteros para que sus afiliados puedan tener cuenta Beps, lo que en Antioquia abre la posibilidad a cerca de 56.000 cultivadores del grano.
Para facilitar la vinculación y el pago de aportes a la cuenta individual de cada beneficiario se dispone de la red nacional de Vía Baloto (Gtech) con más de 700 puntos de atención, además de las 71 oficinas de Colpensiones.
“Antioquia será uno de los focos de expansión de los Beps, comenzando por Medellín, en nuestra idea de que el beneficio tenga incentivos a la medida para distintos grupos poblacionales como venteros ambulantes y también llegar a las zonas rurales donde la cobertura pensional es muy baja”, explicó Olivera.
La iniciativa no ha estado exenta de críticas, como las hechas en el congreso Fiap-Asofondos, gremio de los fondos privados de pensiones, en Cartagena, que concluyó el viernes pasado.
El investigador especialista en pensiones del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Mariano Bosch, señaló que los Beps son una iniciativa que no resuelve el problema de fondo del régimen público de Prima Media.
Al respecto, Olivera aclaró que hay un acuerdo en que la baja cobertura es el principal problema del sistema pensional colombiano y que los Beps “son un modelo alternativo y complementario frente a la contribución a pensión, más que expresión de una incapacidad de resolver el tema pensional”.
El presidente de Asofondos, Santiago Montenegro, señaló que dada la baja capacidad de ahorro de los colombianos más pobres y un incentivo alto no favorece el ahorro de largo plazo. “Creemos que, con el paso del tiempo, la principal fuente de ahorro de este esquema serán las devoluciones de saldos y las indemnizaciones sustitutivas de los trabajadores que no alcancen una pensión”.
Olivera respondió a este diario que los Beps no son excluyentes con las cotizaciones a pensión, y más en un mercado de trabajo donde es muy fácil pasar de la formalidad a la informalidad laboral. “Por eso existe la condición de que no se puede ahorrar simultáneamente en ambas cuentas y al final de la vida laboral se pueden acumular los dos saldos”.
millones de trabajadores
con su cuenta Beps es la meta del Gobierno.