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El movimiento en masa de una montaña, en el sector de Cienaguita, que hoy presenta una caída de material de más de 250 metros casi perpendicular, es una pesadilla para los 1.500 habitantes de cinco veredas del occidente del municipio de Angelópolis, Suroeste de Antioquia.
La alcaldesa de la población, Olga Lucía Zapata Marín, explicó que se trata de un sector por el que atraviesa la falla del Romedal, en el cual desde 2013 fueron detectadas gigantescas grietas, las que han ido creciendo por las fuertes lluvias de la segunda temporada invernal de 2016.
Advirtió que en caso de descolgarse esta franja de montaña afectaría a 1.500 habitantes de las veredas Cienaguita, Cascajala, Promisión, San Isidro, Santa Ana y Caracol, está última en jurisdicción del municipio de Titiribí.
La mandataria advirtió que si este movimiento tan grande de tierra y gravilla no se interviene pronta y técnicamente, puede sepultar varias viviendas que hay en la parte más baja, en el sector de Cañada Vieja, donde hace 15 días un desprendimiento de rocas desde lo alto (más de 250 metros) taponó el cauce de una quebrada que hoy pasa por encima y allí los carros tienen que hacer transbordo.
Este fenómeno afecta la zona más productiva de Angelópolis, que genera numerosos empleos por sus industrias porcinas y haciendas de café. Por estas vías también se moviliza carbón de piedra.
Otra zona veredal aledaña a la Cienaguita, amenazada con quedar incomunicada es la de las veredas El Barrio y Nudillos, ya que a la vía en un tramo se le fue la banca y los carros, en especial de carga, están pasando rozando el precipicio.
En el lugar, el Fondo Nacional de Adaptación invierte 900 millones de pesos en la construcción de un muro de contención, pero los trabajos han sido, según la alcaldes, muy lentos y el Gobierno Nacional les anunció que para continuar se necesita el apoyo del Municipio con una adición de 400 millones de pesos, con los que no cuenta.
La mandataria manifestó que la situación de Angelópolis es muy delicada y hace 15 días el pueblo se levantó con 24 derrumbes en las siete vías terciarias.
Puntualizó que el martes estará en Bello, en el Batallón de Ingenieros Pedro Nel Ospina, ya que el Ejército le anunció que le podía colaborar para mitigar el riesgo. Además se contactará con Corantioquia para ver si es posible que un hidrólogo analice la situación de aguas que presenta la localidad.
Concluyó que ha logrado tener estas vías abiertas gracias a la colaboración de la industria del municipio como Porcicultura Industrial Colombiana, PIC, Sumicol y las minas de carbón El Túnel y Carbonera Acevedo.
El guía turístico de Angelópolis, Francisco Taborda, recordó que de estas fallas hay mención en el municipio, desde hace 200 años, pero como desde hace 20 se han venido poblando, en especial el de Cañada de la Vieja, este movimiento de tierras se convierte en una amenaza.
El tendero Gabriel Montoya, residente en La Cienaguita, dijo que la falla que se presenta en la vereda constantemente presenta derrumbes y hace 20 años se vino una franja tan grande de tierra que quedaron aislados varias semanas.