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Aunque sin los acostumbrados grandes campamentos y la presencia de grupos con numerosos obreros trabajando en las vías, ya se dan las primeras paladas en algunos de los proyectos de Autopistas de la Prosperidad en Antioquia.
La concesión Pacífico 3 tiene un frente de obras en la parte que corresponde al departamento de Caldas, Pacífico 2 empezó por repavimentar el tramo antiguo La Pintada-Primavera y en Pacífico 1 está en ejecución un contrato anterior a la firma de la concesión entre Primavera y el peaje en la vía a Amagá.
A juicio del presidente de la Agencia Nacional de Infraestructura, Luis Fernando Andrade, los contratos normalmente comienzan por las obras que no requieren licenciamiento ambiental, las más sencillas y en la medida en que van saliendo las licencias ambientales los contratistas van comenzando a trabajar en los túneles y en los viaductos.
En su sentir, los procesos de licenciamiento ambiental van bien y en lo que toca con obras físicas, propiamente dichas, el cronograma de trabajo arrancó en varios de los proyectos con lo que se llama la firma del acta de inicio o de construcción. “Los trabajos comienzan por aquellos lugares que necesitan, digamos, menor grado de “permisología” y van gradualmente entrando a las unidades funcionales y a los proyectos que más intervenciones requieren”, dice.
Agrega Andrade que la financiación está fluyendo para las diversas concesiones, al llamar la atención en el sentido de que para tener una buena financiación también hay que estructurar un buen esquema contractual y tener un concesionario con credibilidad.
Cuatro de las concesiones ya tienen cierre financiero (Pacífico 1, 2 y 3 y Conexión Norte) y está próxima una quinta (Magdalena 2). Incluso, esta última se beneficiará con un crédito por 200.000 millones de pesos, producto de la venta de Isagén.
“Para la magnitud de la obra vamos muy bien”, son las palabras de José Fernando Villegas, director Ejecutivo de la Cámara Colombiana de la Infraestructura en Antioquia.
En su opinión, son obras de complejidad sobre todo por la obtención de las licencias ambientales y de la gestión de compra de predios.
“Involucran muchas instituciones con mucho poder y con criterios que muchas veces son diferentes. Como es un tema relativamente nuevo, se vuelve complejo en el sentido de que coordinar eso y sacarlo adelante son plazos bastante exigentes”, agrega.
A pesar de ello, reitera, vamos bien, aunque con pequeños retrasos en algunas de ellas, muy cortos, de dos o tres meses, ligados a las licencias ambientales.
Por fortuna, agrega, uno de los asuntos más delicados que era el cierre financiero hasta ahora va bien. Cuatro de las concesiones que están en Antioquia ya lo lograron.
“Uno entiende que la gente está esperando ya la construcción, pero cuando uno conoce bien la cronología de estas obras, 12 meses es una cifra récord. Yo creo que eso lo hemos aprendido en el sector de infraestructura, que no podemos empezar sin licencia ambiental. Antes arrancábamos así”, dice el directivo gremial.
Y agrega que el mismo sector financiero se ha vuelto exigente con el hecho de que todos estos trámites estén muy bien. Anota además que la banca es más exigente incluso que la misma autoridad, porque lo que quiere es blindarse un poco, que cuando la obra arranque no tenga tropiezos.
“Ha habido experiencias negativas como Ruta del Sol y hemos aprendido la lección”, insiste Villegas.
Entre tanto, Carmen Álvarez, gerente Predial de Autopista Río Magdalena S.A.S. (Magdalena 2), ha calificado de positivo el proceso de preconstrucción de este proyecto, que se une en Remedios con el de Conexión Norte y en el Alto de Dolores (Maceo) con Magdalena 1 y pasando el río Magdalena, en Puerto Berrío, con la Ruta del Sol.
Este consorcio ha entregado diseños de los tramos viales y de impacto ambiental a la interventoría. Aunque el inicio de obras depende de esas otras instancias, esperan encontrar respuestas aprobatorias para el arranque.
Entre marzo y abril está previsto el arranque de obras de este proyecto de la sociedad concesionaria filial de OHL Concesiones.
Entretanto, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) fijó para el próximo 27 de febrero la realización de la audiencia pública ambiental para el proyecto Pacífico 1, la cual se realizará en la Institución Educativa Escuela Normal Superior, en el municipio de Amagá, a partir de las 9:00 de la mañana.
La expectativa es amplia en las comunidades y las nuevas administraciones municipales de los 36 municipios del área de influencia de las Autopistas de la Prosperidad.
Antonio José Lara, alcalde de Dabeiba, en el Occidente de Antioquia, señala que esta será una gran oportunidad para su localidad, porque quedarán a dos horas de la capital antioqueña y a dos horas del futuro puerto de Urabá, en el corregimiento Nueva Colonia, de Turbo.
Dice que el plan de desarrollo que está en construcción para la localidad considera los impactos positivos y negativos de las Autopistas, pero sostiene que serán más la bondades en términos de generación de empleo y de opciones de comercializar los productos agrícolas.
Dabeiba ha sido despensa agrícola de Antioquia y es el mayor productor de maracuyá en el departamento con 200 toneladas semanales de la fruta. También se cultivan café, fríjol y maíz.
El alcalde de La Pintada, César Augusto Zapata, también tiene grandes expectativas con el desarrollo de las Autopistas. Las concesiones Pacífico 1, 2 y 3, que atraviesan el Suroeste antioqueño mejorarán de manera notable la conectividad de su municipio, que es paso obligado en la ruta hacia el Eje Cafetero, Cali y el puerto de Buenaventura.
“Las expectativas son las mejores. Creemos que estas vías nos van a traer mucho desarrollo y nos van a servir para mostrar el municipio como uno de los más prósperos de toda esta zona. La concesiones nos van a traer mucho avance en todos los niveles”, señala el mandatario.
Además subraya que su municipio, ubicado “en el ombligo de Colombia”, será un sitio estratégico para la conectividad en el país.
“La carretera que tenemos hoy es de alta accidentalidad y el tráfico es muy lento. Ya con las Autopistas de la Prosperidad a nosotros se nos va a agilizar el transporte”, concluye el alcalde.
Pero no todo es positivo para los mandatarios locales que esperan el desarrollo de las concesiones 4G en el departamento. En Caldas hay preocupación por la ubicación de un nuevo peaje en jurisdicción del municipio, en el sector de Primavera.
“Lo que nos tiene altamente preocupados es que nos están amenazando con un peaje en la zona urbana del municipio de Caldas. Que ya lo tienen trazado, que ya tienen identificado el lugar... Y que eso nos partiría el municipio en dos, precisamente cuando aspiramos que llegue el desarrollo”, sostiene Carlos Eduardo Durán, alcalde de la localidad.
Explica que la ubicación del peaje dejaría aisladas varias veredas, en su mayoría de gente humilde, y se encuentran en las rutas hacia los municipios de Amagá y La Pintada. Considera que con un cobro adicional en aquel sitio se encarecería la vida, no solo del municipio de Caldas, sino del sur del Área Metropolitana y todo el Suroeste antioqueño.
“Tenemos una propuesta muy lógica: que dejen los mismos peajes que existen, uno en Santa Bárbara y otro en la salida hacia Amagá. Si necesitan, que encarezcan esos, pero que no nos pongan un minipeaje o un peaje en el corazón del pueblo”, anota Durán .