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A intereses electorales, atribuyó el representante a la cámara Wilson Córdoba Mena, el hecho de que por estos días se avive el diferendo limítrofe entre Antioquia y Chocó, que implica al corregimiento Belén de Bajirá que en junio ajustará 15 años desde que la Asamblea del Chocó elevó la población a la categoría de municipio, acto demandado por Antioquia ante el Consejo de Estado.
“Soy nacido y criado en un corregimiento de Apartadó. Y conozco más que nadie ese conflicto en el que cada vez que vienen las elecciones llegamos a este mismo punto”, señaló el congresista antioqueño.
“Hoy a Belén de Bajirá no lo atiende Antioquia por el reclamo del Chocó y Chocó tampoco le invierte. La gente lo que piensa es por las vías de hecho definir su identidad. Pero para eso el país tiene su institucionalidad”, explicó.
Para Córdoba, presente ayer en una reunión que sostuvo el gobernador, Sergio Fajardo, con los congresistas antioqueños y los diputados para informarlos sobre el proceso de deslinde, consideró que ya es hora de que se defina la legitimidad de cualquiera de los dos departamentos, siempre que las comunidades no queden en el limbo sin saber de quién dependen.
Fajardo expuso los argumentos y documentos puestos a consideración del Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igac), entidad que en primera instancia, valiéndose de las pruebas suministradas por Antioquia y Chocó, sería la responsable de resolver el diferendo limítrofe por el corregimiento Belén de Bajirá, por ahora considerado de Mutatá, así como los de Blanquiceth y Macondo, de Turbo.
El mandatario subrayó que por disposición de la Ley 1151 de 2012, Belén de Bajirá no podría ser municipio, ya que en la actualidad no cumple con los ingresos definidos por la norma, cercanos a los 9.000 millones de pesos.
Según la Gobernación de Antioquia, Belén de Bajirá cuenta con 16.000 habitantes entre la cabecera y la zona rural.
La directora de Planeación Departamental, María Eugenia Ramos, señaló que el 26 de febrero una comisión del Igac visitará el territorio y a partir de entonces tendrá un plazo de tres meses para entregar un informe y hacer una propuesta al Congreso para determinar los límites”.
Posteriormente, el Congreso tendrá un año para pronunciarse sobre esa recomendación, de lo contrario el Igac definirá límites provisionales.
Ricardo Smith, delegado del gobernador en el proceso de deslinde, reveló que hace 15 días se estableció una queja ante la Procuraduría General de la Nación, en la que se solicita se investigue al Igac, por haber entregado en enero a las comisiones de los dos departamentos información cartográfica que ubicaba a Belén de Bajirá en territorio chocoano, cuando en su sitio web la línea divisoria atraviesa el poblado.