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Monos titíes de Robledo estrenan paso de fauna
La Secretaría de Medio Ambiente realizó un trabajo de avistamiento de 2 años y detectó el corredor de los primates.
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Este paso de fauna tiene unos 20 metros de altura y aunque, hasta ayer según vecinos, los titíes seguían cruzando por los cables de energía se espera que lo aprendan a usar. FOTO Juan A Sánchez
23 de febrero de 2018
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La colonia de titíes que habita las cuencas de las quebradas La Gómez y El Chumbimbo, en Robledo, ya no tendrán que volver a colgarse de las cuerdas de energía para cruzar la calle 65 B, porque desde comienzos de la semana tienen habilitado un paso de fauna elevado que le da continuidad a su hábitat en este sector del occidente de Medellín.
El secretario de Medio Ambiente de Medellín, Sergio Andrés Orozco Escobar, dijo que estos monos son endémicos de la ciudad y allí, después de un estudio de dos años, han avistado y caracterizado dos grupos: uno compuesto por ocho adultos y dos crías y otro de dos individuos adultos.
Dijo que se tomó la decisión de hacer el puente -cuya construcción duró ocho días- , porque para pasar la vía los animales se colgaban de las cuerdas de alta tensión y la ciudadanía llamó la atención sobre el peligro de que se electrocutaran.
Destacó que este es el primer paso que el Municipio de Medellín construye en la zona urbana. La obra costó nueve millones de pesos.
Recordó que en El Poblado hay un paso de ardillas, hecho por particulares.
El funcionario agregó que construirán este año en la ciudad nuevos pasos de fauna e hizo un llamado a la comunidad para que, como en este caso de Robledo, informe sobre la presencia de animales silvestres en sus alrededores.
El hábitat original
El docente del Instituto de Biología de la Universidad de Antioquia, Iván Darío Soto, quien viene trabajando desde 2011 con primates en Medellín, reveló que el paso fue ubicado en un sitio donde los titiés tienen que pasar porque la 65 B atraviesa el cauce de la quebrada La Gómez, que es su hábitat y no solo tenían que pasar por cables de energía, sino por la vía.
Explicó que estos titíes son originarios de Medellín y la primera descripción de su existencia se hizo en 1886. Luego, en el siglo XX, no se volvió a saber nada de ellos y reaparecieron hace pocos años, seguramente por liberaciones de personas que los tenían en cautiverio.
Agregó que la Secretaría de Medio Ambiente ha avistado en sus estudios 12 individuos, pero como la cuenca de La Gómez es muy amplia el número puede superar los 20.
Juan Guillermo Páramo, director en Colombia de Animal Naturalis, opinó que estos pasos de fauna son efectivos y así se ha demostrado en el Escobero, Envigado, donde se ha reducido el número de animales atropellados, por lo que la idea debe replicarse en troncales como la autopista Medellín-Bogotá.
Sin embargo, analizó, es necesario acompañar esta infraestructura con una muy buena señalización, asociada a campañas educativas para que los conductores sean conscientes de mermar la velocidad al pasar por allí.
Páramo relató que ante los fragmentos de bosques que dejaban las vías que los atravesaban, desde 1950 empezaron a construir pasos de fauna y túneles en las carreteras de Francia. La idea se replicó a los países Bajos y se extendió luego a toda Europa, Australia y Norte América.
Hace seis años, el Concejo de Medellín empezó a hablar de implementar esta idea en la ciudad, pero fue Envigado el que tomó la iniciativa en el alto del El Escobero.
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