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M ás de 700 mil personas que requieren atención de segundo nivel de complejidad en el Hospital Marco Fidel Suárez de Bello (HMFS), de orden departamental, se enfrentan a la falta de atención de servicios especializados porque los profesionales afiliados a Fedsalud no prestarán atención desde hoy a las 7:00 a.m.
Al HMSF, que además de la población bellanita, atiende personas de otros municipios del Aburrá, Norte, Nordeste y Bajo Cauca, le adeudan las EPS y el Gobierno cerca de 60.000 millones de pesos, según explicó su gerente, (e) Alberto Aristizábal.
Las deudas del Hospital a la Federación Gremial de Trabajadores de la Salud, Fedsalud, es cercana a los 6.000 millones de pesos, correspondiente a un año de cartera, según explicó Mauricio Echeverri, presidente de la Junta Directiva de Fedsalud, en una comunicación.
Y es que la situación de iliquidez que enfrentan IPS y EPS en Antioquia y en Colombia lleva a los expertos a reiterar que los hospitales no se cierran de una vez, pero se ven obligados a disminuir sus servicios.
Y ese es el caso del Hospital Marco Fidel Suárez que desde hoy tendrá dificultades para ofrecer anestesiología, cirugía general, ginecobstetricia, pediatría y otorrinolaringología, entre otros. “Fedsalud no puede continuar cumpliendo con las obligaciones laborales de los afiliados mientras el Hospital no pague nuestros servicios en los términos contractualmente pactados”, dijo Echeverri. Son entre 50 y 60 los profesionales que forman parte de la Federación Gremial. El Hospital tiene 770 empleados. “Fedsalud ha pagado oportunamente las obligaciones laborales” sostuvo Esteban Bustamante, su director ejecutivo.
La reducción de la atención será entre el 70 y 80 por ciento, en esos servicios. De 40 a 50 cirugías diarias se realizarán de 8 a 10 procedimientos.
La Administración del Hospital busca alternativas que le permitan superar la iliquidez: entre las EPS liquidadas como Saludcoop, Caprecom y otras entidades le adeudan unos 11.000 millones de pesos.
Elkin Macías espera impaciente a las afueras del Hospital. Han transcurrido varias horas desde que apresurado llevó a su esposa a un centro asistencial de Bello, donde recibió una mala noticia: no la podían atender porque su EPS no tiene convenio con esa IPS. “Yo no sé para dónde se van nuestros pagos”, dice.
Tuvo que correr, de nuevo, con su cónyuge, esta vez para el Hospital Marco Fidel Suárez. “Mi hija está con ella, estoy esperando noticias”, sostuvo mientras observa la puerta de ingreso de los servicios de urgencia.