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Antes del 15 de junio de 2008, fecha en la que fue asesinada la joven bailarina Isabel Cristina Restrepo Cárdenas, el parque Astorga, ubicado a solo tres cuadras del Parque Principal de El Poblado, era un lugar que los mismos vecinos evadían, pues se había vuelto refugio de consumidores de drogas y no un espacio de disfrute ciudadano.
Después de esa fecha, la artista plástica Betty Cárdenas, madre de Isabel Cristina, y un grupo de amigos, cada mes desde ese mismo año, han programado encuentros de arte y danza titulados Alas de Mariposa, en homenaje a la danzarina.
Pero aún así, el parque sigue siendo esquivo para los residentes del barrio Astorga, que todavía lo sienten inseguro, sin buena iluminación y con un mobiliario inadecuado para ellos poder disfrutarlo en familia o entre vecinos.
Y es precisamente lo que la Alcaldía de Medellín, a través de la Empresa de Desarrollo Urbano -EDU-, ahora quiere reparar, con una intervención que busca recuperarlo para los ciudadanos y que este no sea amenaza para su seguridad.
En el proyecto han sido fundamentales varios encuentros de la EDU con los líderes del sector, pues la idea es que al fin se apropien del parque y, al ocuparlo, eviten que sea tomado por delincuentes.
“El trabajo de socialización viene desde marzo. La intención del equipo social es conocer las problemáticas del parque y tejer un proyecto de la mano con la comunidad”, explica Camilo Builes, subgerente de Diseño e Innovación de la EDU.
Aunque la obra está en fase de anteproyecto, la EDU ya tiene claros los aspectos a intervenir. En primer lugar, se acondicionarán bancas y mobiliario urbano para que los habitantes del barrio lo disfruten en todo momento.
Humberto Arango, un jubilado que reside en el edificio Balcones de Astorga, aledaño al parque, siente que el lugar es fresco, pero no es apto para los residentes del sector.
“Acá la mayoría somos personas de la tercera edad, no hay casi niños, y como no hay bancas no lo podemos usar mucho para sentarnos a charlar y compartir”, dice Arango.
La inseguridad se combatirá con nueva iluminación y una intervención a la vegetación del lugar, ya que la actual, en muchos puntos, permite el camuflaje de vendedores y consumidores de droga. Pero ningún árbol de este pulmón verde de El Poblado será talado. Solo tres serán trasladados de lugar, aunque en el mismo perímetro del parque, que tiene un área de 16.000 metros cuadrados.
“En la parte cercana a Patio Bonito se mejorará el parque infantil y se intervendrán los senderos de circulación, para que sean más funcionales”, explica Builes. La renovación incluye miradores, gimnasio al aire libre, zona de mascotas y espacios para actividades lúdicas, como yoga.
“Este ha sido un parque de paso, de la gente que va del metro hacia El Poblado, pero queremos que sea aprovechado, que la gente regrese con sus mascotas y comparta”, señala Gustavo López, presidente de la JAC El Poblado Centro, que ve con optimismo la intervención del lugar.
La inversión se conocerá cuando estén listos los diseños, dice la EDU. Se espera iniciar obras en abril de 2018.