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Dos patrulleros de la Policía del barrio Manrique fueron enviados a prisión mientras son juzgos por presuntamente robar un celular y extorsionar al dueño.
Según una investigación adelantada por la Fiscalía, los policías le pidieron a un joven del barrio Manrique su teléfono celular para hacer una verificación de datos, y luego le dijeron que el equipo figuraba como robado y por eso sería decomisado.
El ente investigador tiene indicios de que los policías le habrían exigido 200 mil pesos al joven, a cambio de devolverle el celular. Éste no sólo se negó a pagar la extorsión sino que los amenazó con denunciarlos, lo que agravó la situación.
La víctima denunció formalmente que el 18 de agosto pasado se volvió a encontrar a los policías y que ellos, luego de golpearlo, le robaron 580 mil pesos en efectivo y se quedaron con sus documentos de identidad. La Fiscalía reportó que tras la golpiza, a la víctima le tuvieron que dar una incapacidad médica de 8 días.
Los dos uniformados fueron capturados el pasado viernes y en su poder el CTI encontró los documentos de la víctima y 5,6 gramos de cocaína.
Un fiscal de la Unidad de Reacción Inmediata (URI) les imputó los delitos de hurto calificado y agravado, concusión, peculado por apropiación y conservación de estupefacientes, pero ante un juez ellos decidieron no aceptar su culpabilidad en el caso.
Los policías seguirán en prisión mientras avanza el proceso en su contra y se emite la respectiva sentencia.