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Además de la cuota mensual que les obligan a pagar a algunas administraciones de las 93 torres que tiene el complejo residencial Territorio Robledo, que van entre los 45 mil y 100 mil pesos mes, los delincuentes le añadieron el rubro de vigilancia de carros y motos.
Según una denuncia conocida por EL COLOMBIANO a los parqueaderos desde las cinco de la tarde, están llegando jóvenes motorizados, con gorras, y cada que un conductor se baja del carro o de la moto, le piden la colaboración por la custodia de estos vehículos y anotan los números de las placas.
Agregaron las fuentes que estos muchachos, para evitar la acción de la Policía, cuentan con teléfonos celulares y un sistema interno de radios de comunicación.
También tienen campaneros en moto y para evitar que las autoridades los sorprendan con grandes sumas de dinero, se lo pasan a hombres de más edad, que son los cabecillas de la banda, la que los denunciantes no identifican.
Lo más delicado, dijo una de las víctimas es que los jefes de esta banda han comprado apartamentos en las torres.
Para el secretario de Seguridad de Medellín coronel (r) Sergio Vargas Colmenares, esta es una problemática que se viene dando desde hace varios meses y ya el Gaula de la Policía Metropolitana tiene una ruta de investigación. Anotó que los hombres, para intimidar a la ciudadanía, se hacen pasar por integrantes del “Clan Úsuga”.
Especificó que son 93 torres con 14 mil habitantes, que tienen un problema delicado, porque las constructoras hicieron parqueaderos públicos de carros y motos, lo que causa problemas de convivencia entre los vecinos por los espacios de los estacionamientos y de esta situación se aprovechan los extorsionistas, que piden cuotas por organizar y cuidar.
El Gaula investiga de oficio, dijo, pero busca estrategias para que no evadan la ley ya que este delito necesita una prueba objetiva, que es el dinero, que no es delito portarlo y la subjetiva, la amenaza, que no se da, porque piden una contribución.