Dos hermanos residentes en el humilde sector La Iguaná, al occidente de Medellín, fueron asesinados a tiros en un lapso de apenas 13 horas.
El primero de los crímenes se presentó a las 5:00 p.m. del pasado jueves 11 de agosto, cuando Yolian Guillermo González Restrepo viajaba como pasajero de un bus de servicio público.