viernes
7 y 9
7 y 9
Los habitantes de Turbo, en Urabá, no aceptan más medidas paliativas al problema de cobertura del sistema de acueducto.
La crisis por el intermitente y, en algunos casos, nulo suministro del líquido en esa localidad de Urabá, ha desatado la protesta de la comunidad y a su vez la búsqueda de soluciones definitivas.
En ese sentido ya hubo una primera reunión, el pasado jueves, de la recién creada mesa de trabajo, integrada por autoridades, habitantes y directivas de Empresas Públicas de Medellín (EPM), dueña del sistema, arrojó resultados.
Según Carlos Pinilla, gerente de Aguas Urabá, compañía de EPM en la región, la Universidad de Antioquia estudiará las posibilidades de extraer agua del río Atrato para ampliar la cobertura y potabilizar el agua en la municipalidad.
Agregó que este año tendrán el tercero pozo para el municipio e invertirán en otras obras de alcantarillado 7.000 millones de pesos.
“Estamos en el proceso de compra de terrenos”, anotó,.
Agregó que como proyecto a largo plazo analizan la construcción de un sistema de tratamiento de aguas que se abastezca de ríos como el Atrato, Carepita y del mar.
De las 14.000 instalaciones que en promedio tiene Turbo, 8.200 cuentan con servicio de acueducto.
Sin embargo, una tercera parte de las más de 8.000 se quedan, por completo, sin agua con la llegada del verano.
Raúl Pérez es uno de los afectados. Aunque, al compararse con otros moradores de Turbo que nunca tienen agua se considera privilegiado, aseguró que recibe el líquido tan solo una hora al día.
“Si no hay bajo nivel del río o una exagerada creciente, me llega diariamente entre las 5:30 y 6:30 a.m”, acotó.
El sector del turismo también sufre por la falta de agua. John Botero, administrador del hotel Florida, afirmó que ayer tuvieron el líquido entre las 10 a.m. y las 12:30 p.m.
“El agua me llega a los tanques subterráneos y la subo con motobomba a las habitaciones. No obstante, no es bien tratada y me ha tocado comprarla en bolsa. Otras veces le tengo que echar cloro granulado”, añadió.
Para contrarrestar la afectación por el verano, como ha sucedido en los últimos días, EPM y la alcaldía de Turbo, dispusieron de carrotanques y baterías que ubican en zonas estratégicas de Turbo para que los habitantes se abastezcan.
Otra preocupación de las autoridades y que, de acuerdo con Pinilla, implica que no se avance en soluciones, es el fraude y la morosidad de algunos usuarios.
“De cada 100 litros que salen de nuestro sistema solo facturamos el 25 por ciento. Algunos trayectos tienen tuberías viejas y en otros donde hay fraude”, enfatizó. Mientras la comunidad persiste en soluciones inmediatas, las alternativas están sobre la mesa pero no parecen ser a a corto plazo .