Así avanza la investigación sobre el secuestro de Daniela Mora

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Esclarecer qué pasó en los 13 minutos que trascurrieron entre el acercamiento de un sospechoso al carro que llegó a recoger a Daniela Mora, en la tarde del jueves, a un instituto de enseñanza ubicado en Ceiba II, y el momento en que la niña salió de este lugar para abordar el vehículo que la esperaba, ayudará a determinar cómo se inició el secuestro de la menor.

En cámaras de seguridad del lugar donde ocurrió el plagio de la hija del director de la Unidad Nacional de Protección (UNP), Diego Mora, quedó registrado el momento en que un hombre de contextura gruesa, vestido de jean, camisa manga larga blanca, con un canguro colgado en la cintura y de peinado militar, atraviesa la calle un minuto después de que llega el carro marca Toyota Corolla, color blanco, de placas CDD-265, para recoger a la niña de 11 años.

El acercamiento del desconocido se produjo a las 4:54 de la tarde, mientras que Daniela salió a las 5:07 p.m. del lugar donde aprende a través de un método japonés, matemáticas y español.

El sospechoso rondó el sitio una hora antes del suceso y además, conversó con algunas personas que estaban alrededor.

“Estuvo preguntando por un vecino del instituto; actuaba de manera nerviosa. En un momento cambió el chip del celular”, comentó una de las personas que tuvo comunicación con él.

Al parecer, un motociclista acompañó al sujeto e hizo las veces de informante.

Esa misma motocicleta, de alto cilindraje, pasó por el lugar justo en el momento en que la niña llegó a recibir la clase, a las 3:50 de la tarde.

Una vocera de esta institución aseguró que a las 6:30 de la tarde recibieron una llamada sospechosa de una mujer, preguntando si la menor había salido del lugar.

“No le dimos información, pero nos pareció muy rara la llamada”, explicó.

Hallaron el carro

A través del GPS del celular de alta gama que tenía la niña fue ubicado el carro, que había sido abandonado en Cornejo, municipio de San Cayetano; el conductor, quien trabaja con la familia Mora desde hace al menos tres años, fue hallado amarrado, sobre la carretera.

La Policía Metropolitana de Cúcuta, apenas fue advertida del plagio, activó un plan candado con al menos 160 hombres en tierra y aire, para tratar de localizar a los captores.

Asimismo, el director del grupo Gaula de la Policía Nacional, coronel Fabio López, llegó a Cúcuta en la noche del jueves para liderar las investigaciones. También arribó a la ciudad el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, y el padre de la niña, Diego Mora, quien se enteró del secuestro de su hija mientras estaba en Cartagena, dictando una conferencia sobre drogas.

En el comando de la Policía de Cúcuta se desarrolló un consejo extraordinario de seguridad que terminó promediando la 1:30 de la madrugada de ayer, y en el que participaron los organismos judiciales, el gobernador de Norte de Santander, Edgar Díaz y el alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez, para determinar las acciones que permitan el rescate de Daniela Mora.

El ministro Cristo aseguró que al país le duele mucho y además, le preocupa que sigan ocurriendo estos secuestros, en el que la víctima es una menor de edad.

“Hay que confiar plenamente en el Gaula y en la Policía para que en una rápida acción podamos recuperar a Daniela”, dijo.

Aseguró que ninguna hipótesis se puede descartar en el momento, a pesar de que inicialmente se habló de que los captores pertenecerían a una organización de delincuencia común.

Dijo que desde el jueves se tomaron las precauciones necesarias con las autoridades del vecino país para evitar que los secuestradores pasaran la frontera con la niña de 11 años.

Por su parte, Diego Mora aseguró que sigue orando para que su hija regrese sana y salva.

Dijo además que no ha recibido ninguna llamada de los presuntos captores para exigirle dinero.

“Yo desmiento que me hayan llamado y menos que me estén pidiendo 500 millones de pesos”, dijo el director de la Unidad Nacional de Protección, refiriéndose al rumor de que habría recibido varias llamadas extorsivas.

Asimismo, aseguró que nunca ha recibido amenazas y que no tiene enemigos.

Descartó que su cargo tenga alguna relación con el plagio de su hija menor.

Mora explicó que no consideraba necesario que su hija mantuviera un esquema de seguridad.

“No había esquema de protección, ella tenía un carro blindado de nosotros, pero nunca se pensó que se necesitaba esquema de seguridad para ella”, dijo.

Aseguró, además, que el presidente Juan Manuel Santos le expresó su solidaridad y que está muy atento a lo que ocurra con su hija.

El defensor del Pueblo en Norte de Santander, William González, rechazó el secuestro de la niña y expresó que ya se adelantan todas las acciones humanitarias para que la menor regrese a su hogar.

El gobernador Edgar Díaz resaltó su solidaridad con la familia Mora Caicedo y dijo que prestará toda la atención necesaria que requiera el caso.