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Así es el rompecabezas del caso del magistrado Pretelt
La esposa de Pretelt, Martha Patrón, fue llamada a interrogatorio por la Fiscalía. Mientras tanto él insiste en que no renunciará al cargo en la magistratura.
23 de marzo de 2015
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La crisis de legitimidad por la que está pasando la Corte Constitucional parece no ver la luz al final del túnel. Cuando el país apenas esta tratando de entender el escándalo que involucró inicialmente al abogado de Fidupetrol, Víctor Pacheco, y a los magistrados, Jorge Pretelt, Mauricio González y Luis Ernesto Vargas, con el pasar de los días y a medida que avanzan las diligencias judiciales, aparecen nuevos protagonistas de este triste episodio.
Ahora, un exmagistrado de esa Corporación, Rodrigo Escobar Gil; la exdirectora de Fiscalías de Córdoba, Gilma Londoño; el fiscal general de la Nación, Eduardo Montealegre, y hasta la esposa del mismo Pretelt, Martha Ligia Patrón, hacen parte del rompecabezas de un escándalo, cuyas proporciones, según los hechos recientes, son incalculables.
Víctor Pacheco
Es una de las fichas claves del escándalo. Se desempeñaba como abogado de la empresa Fidupetrol y afirmó que en una reunión que sostuvo el año pasado con Jorge Pretelt, este le pidió dinero a cambio de un fallo favorable de una tutela en la que la empresa que representaba tenía interés.
Magistrado Luis Ernesto Vargas
Fue el primer magistrado en conocer del supuesto soborno. Víctor Pacheco le contó lo que le había dicho Pretelt. Sin embargo, se le cuestiona haberse demorado tanto en dar a conocer los hechos. Además, grabó a Pacheco, sin su consentimiento, lo que también es reprochable.
Magistrado Mauricio González
La tutela en la que tenía interés Fidupetrol había sido asignada a su despacho. Fue quien destapó este episodio al solicitarle a la Comisión de Acusación de la Cámara que investigara a Pretelt. Supuestamente, Pretelt le dijo al abogado Pacheco que si le daba $500 millones podía interceder ante González para que este votará favorablemente la tutela. González se enteró de los hechos cuando su compañero, el magistrado Vargas, le contó la versión de Pacheco.
Exmagistrado Rodrigo Escobar Gil
Es señalado por Pacheco de ser el presunto intermediario para el pago del soborno. Se conoció de un contrato con Fidupetrol por los servicios de asesoría jurídica con honorarios por 200 millones y una prima de éxito por otros $200 millones. También se supo que durante un almuerzo le mencionó el tema de la tutela al magistrado González.
Representante Julian Bedoya
Este representante antioqueño oficia como presidente de la Comisión de Acusación. Estuvo en el ojo del huracán cuando se descubrió que no era abogado tal como él afirmaba. Además, salió a la luz pública que fue expulsado de la Escuela de Oficiales General Santander de la Policía a escasos días de graduarse como teniente por presuntamente querer hurtar un arma de fuego de la institución.
Gilma Londoño
Se desempeñaba como directora de Fiscalías de Córdoba, pero fue declarada insubsistente por el ente acusador. Ganem, quien llevaba 24 meses en el cargo, es señalada de ser cuota política de Pretelt y por ende de nombrar funcionarios cercanos al magistrado.
Martha Ligia Patrón
Fue llamada a interrogatorio por la Fiscalía para que responda por la compra, aparentemente irregular, de los predios La Corona y Alto Bonito en el Urabá Antioqueño. Al parecer esos terrenos habrían sido despojados por paramilitares a campesinos y Patrón los adquirió para luego vendérselos a su esposo, el magistrado Pretelt.
Fiscal Eduardo Montealegre
Llamó a interrogatorio a la esposa de Pretelt para que responda por delitos de guerra y lesa humanidad. Pretelt afirma que Montealegre quiere acorralarlo debido a diferencias en su posición frente al Marco Jurídico para la Paz. Mientras que Pretelt indicó que el fiscal trató de convencerlo de que modificara su ponencia sobre una demanda al Marco Jurídico para la Paz.
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