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Nuevo billete de 20.000 ya lo falsifican en Bogotá
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La banda criminal se dedicada a la falsificación y el tráfico en Cundinamarca, Boyacá y Santander. FOTO Cortesía Policía Nacional -
La banda criminal se dedicada a la falsificación y el tráfico en Cundinamarca, Boyacá y Santander FOTO Cortesía Policía Nacional
La Policía Nacional desarticuló este miércoles en Bogotá una organización delincuencial denominada “Los mochila” dedicada a la falsificación y el tráfico en Cundinamarca, Boyacá y Santander de los nuevos billetes de 20.000 pesos, los cuales llevan solo 4 meses en el mercado.
Como resultado de ocho operativos policiales de allanamiento y registro, las autoridades capturaron a 17 personas, quienes operaban en el interior de establecimientos comerciales, supermercados, plazas de mercado y parques públicas de diversos municipios. Entre los detenidos se encuentra el cabecilla de la organización conocido como “Cucho”, contra quien fue expedida una notificación azul de Interpol para evitar su evasión de la justicia.
Seis de implicados ya contaban con una lista de antecedentes por hechos similares, según lo confirmó la teniente coronel y jefe del área investigativa especializada, DIJIN, Flor Edilma Cañón.
De acuerdo con la investigación que duró un año, la organización criminal había falsificado entre 10 y 15 millones de réplicas de los billetes que pueden equivaler a 500 millones de pesos.
La teniente coronel Cañón aseguró que “Los mochila” falsificaban también moneda extranjera y, aparte de todo, porque varios de sus integrantes tenían familia fuera del país.
Los capturados deberán responder por los delitos de concierto para delinquir, falsificación de moneda nacional y extranjera. En el operativo fueron incautadas dos armas de fuego; billetes falsos de diferentes denominaciones, entre ellos los nuevos billetes de 20.000 y 1.750.000 de pesos producto de la comercialización del ilícito.
Según la Policía Nacional, en el lugar fue hallado un altar de santería donde se rendía culto a la santa muerte, buscando protección para continuar con esta actividad ilícita. “Allí se le hacía culto a la “santa” muerte. Básicamente ellos lo usaban , en sus creencias, como medida de protección y de poder seguir con su labor”, finalizó Cañón
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