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Hoy vence el plazo impuesto por el presidente Iván Duque para evaluar los diálogos de paz entre el Gobierno y el Eln y la negociación en esta era parece no tener mayor futuro.
Durante las últimas semanas la discusión se ha concentrado en el tema del secuestro, el mismo que detuvo, durante un año, el inicio de las negociaciones en el Gobierno de Juan Manuel Santos.
El Ejecutivo le exige al Eln que libere a todos los secuestrados, aunque no hay una cifra clara de en realidad cuántos son, algunos retenidos desde el 2002. “Es muy importante que el Eln libere a todos los secuestrados, no solo son estas tres personas (las de Arauca). Se aprecia como un buen gesto esa liberación, pero en Colombia hay muchos más secuestrados y las familias de todos ellos los esperan”, expresó el alto comisionado para la paz, la legalidad y la convivencia, Miguel Ceballos.
Se espera que el Frente de Guerra Occidental, con presencia en Chocó, entregue unilateralmente los seis secuestrados que tiene hace poco más de un mes (un soldado, dos civiles y tres policías), así como lo hicieron las tropas de Arauca anteayer, pero, según ha dicho su comandante “Uriel”, las condiciones militares no están dadas.
Sin embargo, liberar a los secuestrados no es la única condición. El alto comisionado aseguró también que esa guerrilla debe expresar cuál es su presencia en Venezuela. “Ese es un punto que debe aclarar esa organización, porque es imposible llegar a considerar un cese al fuego, cuando parte de la tropa o de sus miembros está en un país ajeno”.
Así mismo, el mandatario dijo desde Bucaramanga el miércoles pasado que si esa organización está interesada en un diálogo de paz debe cesar sus acciones bélicas: “Estamos listos para iniciar la conversación sobre la base de ponerle fin a las actividades criminales, si no hay una suspensión de ese accionar, ni la liberación, estaríamos aceptando la violencia al estado de derecho. Si hay voluntad genuina por parte del Eln, acá estamos listos, pero Colombia quiere un gesto claro y la liberación de los secuestrados”.
Para el Eln lo que ha ocurrido en el año y medio que llevan las conversaciones es positivo. “Pablo Beltrán”, jefe de la delegación elena, expresó que “hay una hoja de ruta trazada, hay una agenda, hay unos avances y tenemos unos puntos de llegada muy precisos: cambios básicos urgentes, derechos de las víctimas y sacar la violencia de la política”.
El comandante guerrillero señaló que los avances más importantes se han dado en la participación de la sociedad, y en el pacto de algunos acuerdos humanitarios siguiendo el Derecho Internacional Humanitario, DIH, hubo un primer cese el fuego bilateral y se adelantaron los protocolos para la segunda tregua.
“Tenemos toda la intención de seguir las conversaciones con el gobierno de Duque y que la participación de la sociedad siga siendo protagónica y la de la comunidad internacional siga siendo muy activa, porque estos son los soportes para que toda esta agenda termine”, concluyó Beltrán.
Aunque el presidente Duque no ha dado su última palabra, la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, empezará las gestiones para permitir las negociaciones.
“En los próximos días traeremos la ampliación de los términos de la ley 418, conocida como Ley de Orden Público, que ha sido el marco jurídico para muchos de los procesos de reincorporación y de paz que se han dado con el Estado colombiano”, dijo la alta funcionaria. Así que pronto se conocerá la evaluación del Gobierno y el futuro de este intento de paz.