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Los empresarios, las centrales obreras, la Iglesia y la víctimas reaccionaron este martes sobre la suspensión de los diálogos tras el secuestro del general Rubén Darío Alzate, comandante de la Fuerza de Tarea Titán, en el corregimiento de Las Mercedes, departamento del Chocó.
Los empresarios, representados por el Consejo Gremial Nacional, expresaron su apoyo a la decisión del presidente Juan Manuel Santos de suspender los diálogos de paz hasta que ese grupo libere al general y las otras personas secuestradas en los últimos días.
“El Consejo Gremial Nacional reitera su mensaje de solidaridad con el Gobierno Nacional, hace llegar a los familiares de los secuestrados su más sentida voz de solidaridad y hace un llamado a las Farc para que cesen este tipo de actos violentos que lejos de fortalecer su posición en la negociación, generan una profunda desconfianza entre los colombianos y ponen en peligro alcanzar la paz que todos anhelamos”, señala el comunicado.
La organización, que agrupa a las 21 patronales más poderosas del país, añade: “Rechazamos vehementemente los actos de violencia que las Farc, en una actitud contradictoria, han llevado a cabo en las últimas semanas”.
Además de los secuestros, los empresarios manifiestan en el comunicado su rechazo al asesinato de dos indígenas de la comunidad Nasa el pasado 5 de noviembre y los atentados a la infraestructura del país, todos estos, hechos que, agregan, “merecen el más fuerte repudio de nuestra sociedad”.
“Los empresarios colombianos han sido generosos y han apoyado el proceso de negociación con las Farc, dejando de lado un pasado terrible y aportando a la construcción de paz. Es por eso que exigen a las Farc una actitud coherente y demandan la liberación inmediata de todos los secuestrados”, concluye el comunicado.
Por su parte, las centrales obreras registraron con “suma preocupación” el secuestro del general Alzáte.
La Central Unitaria de Trabajadores (CUT) le pidió a las Farc la libertad “inmediata” de los secuestrados; pues “ello contribuiría a mantener un clima de compromiso y eficacia hacia la consolidación de unos acuerdos que superen el conflicto armado”.
Por su parte, la Confederación General del Trabajo (CGT) advirtió que esta es “una nueva muestra de la doble moral de sus cabecillas que hablan de paz en La Habana mientras en Colombia secuestran y asesinan a civiles inermes y a militares. Exigimos gestos de paz de la guerrilla que se traduzca en la inmediata liberación y sin condiciones de todos los militares y civiles secuestrados”, enfatizó el movimiento sindical.
Finalmente, la CUT hizo un llamado a “apoyar y fortalecer la negociación política para la solución del conflicto armado y ante los nuevos hechos, como la suspensión de los diálogos por parte del Gobierno Nacional, la Central se une a todas las instituciones y ciudadanos que reclaman su continuidad para el cese definitivo de 50 años de violencia, atraso y exclusión social”.
La Asociación de Oficiales Retirados de las Fuerzas Militares (Acore) respaldó también la decisión tomada por el presidente. “Hemos sido muy claros, respaldamos la decisión del presidente de la suspensión de los diálogos y solo queremos que se retomen cuando sean liberados los recién secuestrados”, aseguró el general Jaime Ruiz.
Por otra parte, afirmó que no esta de acuerdo en que se retomen las conversaciones mientras las Farc sigan haciendo atentados, asesinando personas ajenas al conflicto y secuestrando. En ese sentido Ruiz llamó la atención para que haya claridad en el proceso respecto a estos puntos, porque de lo contrario continuarán estas irregularidades.
“Esperamos que la liberación del general Alzate y sus acompañantes sea pronta y bajo ninguna circunstancia se postergue, pues las Farc ya están hablando de que esto se definirá en un tribunal popular, lo que si haría más demorada esta liberación”, indicó el presidente de Acore.
Mientras tanto la Asociación de Oficiales Retirados pide que liberen pronto los cinco secuestrados: el general Rubén Darío Alzate, la abogada Gloria Urrego, el cabo segundo del Jorge Contreras Rodríguez , y los soldados Paulo Cesar Rivera Capela y Jhonatan Andrés Díaz Franco, para que posteriormente definan lo que ellos consideran irregular y se pueda retornar sin más inconvenientes el proceso de paz.
Víctimas de Estado e Iglesia exigen al Gobierno reanudar diálogos
El Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado (Movice) exigió al Gobierno que reanude las negociaciones de paz con las Farc y que se decrete el cese bilateral al fuego.
En un comunicado, este colectivo reitera que “la vía para alcanzar la paz es la negociación política del conflicto armado”, y lamenta que el Ejecutivo de Juan Manuel Santos haya “insistido en negociar en medio de las hostilidades y confrontación bélica, lo que debilita la confianza de las partes en el proceso”.
Por este motivo consideran necesaria “una tregua bilateral y un cese al fuego, que permitan el desescalamiento del conflicto, que cuente con efectivos mecanismos de verificación y seguimiento pactados por los partes”.
Así mismo, el presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, Luis Augusto Castro Quiroga, desde la Iglesia aunque rechazó el secuestro del general, hizo un llamado al Gobierno para que se continúen con los diálogos de paz en la Habana, Cuba.