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En un bombardeo de la Fuerza Pública a un campamento de las disidencias del frente séptimo de las Farc, en el municipio de San Vicente del Caguán (Caquetá), murió uno de los delincuentes más buscados del país: Édgar Mesías Salgado Aragón, alias “Rodrigo Cadete”.
Las Fuerza Especiales del Ejército lanzaron la Operación Orinoquía en la madrugada de este sábado, con bombardeo y despliegue de tropas en una zona rural cercana al río Yarí, de acuerdo con las informaciones preliminares. Hasta el momento se han recuperado 10 cadáveres, pero la cifra podría aumentar una vez que los militares terminen de revisar el área, de acuerdo con fuentes cercanas al caso.
En la primera inspección al lugar, los uniformados atendieron a cuatro personas heridas, al parecer integrantes de la misma organización ilegal; entre ellas había tres menores de edad. También decomisaron un arsenal conformado por un lanza granadas MGL, 11 fusiles, dos escopetas, cinco pistolas y un changón. Los hallazgos incluyeron una tonelada de víveres, tres computadores y cinco memorias USB, así como chalecos, morrales y demás material de intendencia.
El presidente Iván Duque confirmó la muerte de “Rodrigo Cadete” en la tarde de este sábado, declarando que se trató de una operación impecable contra “una de las figuras más temidas del terrorismo en nuestro país”.
Salgado Aragón fue uno de los primeros cabecillas de las Farc que se rebeló contra el proceso de paz que el Gobierno y la guerrilla adelantaban en La Habana, en 2017. Las autoridades recordaron que al principio había aceptado someterse a lo pactado en Cuba y concentrarse con otros exmilitantes en una zona veredal de Caquetá, hasta septiembre de ese año, cuando les quitó las armas a sus escoltas de la Unidad Nacional de Protección y desapareció.
En compañía de otros comandantes, como “Gentil Duarte” e “Iván Mordisco”, se refugió en un área selvática entre Caquetá y Guaviare, liderando un grupo de excombatientes del frente séptimo.
Este resultado se suma al de otros cabecillas de disidencias dados de baja en los últimos meses, entre ellos alias “Guacho”, del frente Oliver Sinisterra, y “David”, de la columna móvil Daniel Aldana. Ambos delinquían en el departamento de Nariño y la frontera con Ecuador.