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Sapphyre Johnson, de tres años, nació sin algunos dedos en sus manos y pies. Cuando tenía un año, el hospital Shriners en Greenville, Carolina del Sur (Estados Unidos), le regaló unas prótesis, pero tuvieron que amputarle los únicos dedos que tenía en los pies para que pudiera usarlas.
Como terapia, la niña recibió un perro de nueve semanas que para su sorpresa, sufre la misma condición de ella: al cachorro le falta una de las patas delanteras.
Su dueña, Karen Riddle, sabía que El Teniente Dan, un pastor alemán blanco, estaba destinado para algo especial. Entre una camada de nueve cachorros, fue el único que nació sin una pata y muchas le sugirieron que saliera de él.
Sin embargo, Riddle buscó una persona a la que el cachorro pudiera acompañar y hacer feliz. Así fue como llamó al hospital Shriners y encontró a Sapphyre, quien ha sido paciente desde que tenía solo tres meses de edad.
Su madre, Ashley Johnson, comenta que a los siete meses de embarazo cuando le hicieron un ultrasonido, le advirtieron que a la niña le faltaban algunos dedos de las manos y los pies. Los médicos nunca pudieron especificar cuál fue la causa.
Shriners, que proporciona servicios especializados de aparatos ortopédicos para los niños y jóvenes hasta los 18 años, independientemente de su capacidad de pago, se ha ofrecido a hacer una prótesis para el Teniente Dan
“La primera vez que le mostré una foto del perro, ella lo miró por un momento, y dijo: “ese es mi cachorro. Él es como yo”, contó el especialista Elaine Hardin.
El perro le ayudará a Sapphyre hacer amigos y a explicar su discapacidad a otros niños, valoró el especialista.
El caso se ha vuelto viral en redes sociales y ahora todos quieren seguir la historia entre Sapphyre y el Teniente Dan. Este video publicado en YouTube el pasado martes 21 de abril, ya cuenta con 19 mil reproducciones.