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“En nombre de las Farc-EP ofrezco perdón a todas las víctimas del conflicto, por todo el daño que hayamos podido causar en esta guerra”.
Esta frase -que era una de las frases más esperadas por las víctimas del conflicto interno- la dijo ayer Rodrigo Londoño Echeverri, alias “Timochenko”, unas pocas líneas antes del cerrar su discurso, en el que invitó a “desarmar la mente y los corazones”.
El líder guerrillero pidió “que se reconozca que las Farc EP siempre intentamos, por todos los medios, evitarle a Colombia las desgracias de un prolongado enfrentamiento interno. Otros intereses, demasiado poderosos en el plano internacional, y en los centros urbanos y en los campos del país, se encargarían de inclinar la balanza en el sentido contrario, a través de múltiples medios y de una intensa acción comunicativa, en la que la manipulación mediática y la mentira han hecho pan de cada día”.
Para “Timochenko”, el reto ahora es hacer realidad los acuerdos y ahí el pueblo será el principal garante de ello.
Para Andrés Úsuga Marín, docente universitario e investigador en polemología, “la paz no está completa”. Y la razón que dio para ello es que en el discurso de “Timochenko” no encontró dos cosas que le parecen importantes.
La primera de ellas, es que no vio en el cabecilla guerrillero un mea culpa por haberse alzado en armas contra la institucionalidad, por haber usado las armas contra los colombianos. En su sentir, eso significa que volvería a tomar las armas, si se justificara.
La segunda ausencia que destacó el analista, es que alias “Timoleón Jiménez” no le formuló una invitación al Eln para que se sume a los esfuerzos de paz. “A uno le queda la duda de si la entrega de armas ya se hizo, pero al Eln, con ese cambio de brazalete que se comenta en algunos círculos. Eso me preocupó”.
Para el experto en seguridad, John Marulanda Marín, las palabras de “Timochenko” encajan en el típico discurso fariano, con giros y expresiones que le echan la culpa a la clase dirigente.
“Rescataría la petición pública de perdón, abierto, ante la comunidad internacional, corto y seco, pero gracias a Dios no se explayó más”.
En concepto de Marulanda, este hecho va a tener un impacto importante en el plebiscito, del próximo domingo, pues “convencerá a muchos”. El analista destacó también la reiteración de la promesa de que las Farc ingresarán a la política sin armas, para desarrollar un proyecto de 8 o 10 años para llegar al poder .