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Estrenos colombianos para ver en dos semanas
Una propuesta reunió películas que posiblemente no va a ver en cartelera comercial, y que llegan a Medellín a un mismo espacio.
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Fotograma de la película Interior, de la directora caleña Camila Rodríguez, que se verá en el Mamm. FOTO película
06 de septiembre de 2018
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Algo positivo está pasando con el cine colombiano: hay una variedad y cantidad nunca antes vista. La semana pasada cinco películas estuvieron en cartelera, un fenómeno impensable en otra época. En los próximo días se estrenan siete cintas en espacios alternativos del país.
Desde 2014, la compañía productora y distribuidora Mutokino se ha enfocado en la promoción del cine nacional que generalmente no llega a los circuitos de distribución convencionales, sino a salas alternativas (por ahora en Bogotá, Cali y Medellín).
Al Museo de Arte Moderno llega Fórum, programa que exhibe durante dos semanas siete películas nuevas (ver recuadro), una oportunidad, según los organizadores, para reconciliarse con el cine que se produce en Colombia.
Surgimiento
Para el director y curador de la muestra, Felipe Guerrero (Oscuro animal), la intención es visibilizar películas que se quedan en el “cuello de botella” de la distribución y la exhibición. El término se emplea porque precisa uno problema del cine colombiano: la gente no va a ver y, por tanto, no es fácil encontrar quién las divulgue o las presente.
Aunque no sucede con todas. Guerrero indica que hay un tipo de cine mainstream (convencional) que se ve en directores como Ciro Guerra (Pájaros de verano, El abrazo de la serpiente), que tienen mejores posibilidades que otros que le apuestan a narrativas más difíciles (aunque innovadoras), un síntoma que no duda en calificar como saludable para el país, pero no atractivas para las salas comerciales. “Son bastante frágiles para sacarlas al mercado”, comenta.
Interior
Interior es un largometraje que ocurre dentro de una habitación. El espectador va acumulando historias que se suceden sin un personaje principal, con múltiples retratos de distintas personas. Las historias surgen de gente real que se enfrenta a tipos de violencia o inequidad, a una mala atención de una EPS o a buscar dinero para el diario.
Su directora, Camila Rodríguez, cuenta que hacer este tipo de producciones, de corte más radical y por fuera de lo comercial (“que no se está acostumbrado a ver”), entran a circuitos de salas más especializadas. “En Colombia uno intenta presentar en festivales y salas alternas, pero no más”.
De ahí que se abran espacios como Fórum, una alternativa a esa “ley de la selva”. “Si tú no haces un filme que pueda ser ‘atractivo’, simplemente no se pone a circular”, dice Guerrero. Según él, el problema es que exhibidores y distribuidores se agarran de las preferencias del público y olvidan la formación de públicos.
Invita a dejarse “encandilar” con estas cintas que están haciendo jóvenes realizadores colombianos.
7
películas independientes (entre largos y cortos) se estrenan en el país.
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