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Inicia hoy el Primer Festival de Cine de Jardín, tratando el tema de la guerra en el mundo y también el
del perdón.
El cine es una herramienta del perdón y una manera de aprender cómo otros superaron la guerra desde los dos puntos de vista: víctimas y victimarios.
A eso le apunta el Primer Festival de Cine de Jardín que inicia este viernes.
Serán 12 las películas que se exhibirán en el municipio del suroeste antioqueño, que debuta como sede del nuevo proyecto dirigido por el director de cine Víctor Gaviria y la Corporación Antioquia Audiovisual.
Perdonar lo imperdonable
La frase “solo se perdona lo imperdonable”, de Jacques Derrida, es el punto de partida para enfocar tanto la parte cinematográfica como académica que se apreciará en el festival. Así lo cree el crítico de cine y coordinador académico, Andrés Upegui, quien ve en los dos temas, filmes y exposiciones, la combinación perfecta para hablar de postconflicto.
“En el caso de las películas, estas muestran el tema del posconflicto en otros países, no solo tomando la parte política, sino tal vez el aspecto más importante: lo ético, lo espiritual y el perdón. Lo que va más allá de la política”, expresa Andrés.
Mientras que la parte académica, agrega, tiene como fin hablar sobre el conflicto armado en Colombia y el proceso de paz, apoyados en analistas, religiosos, escritores y académicos.
“Es la parte donde queremos abordar la historia colombiana desde los pensadores. Personajes como León Valencia, William Ospina y Vera Grabe, entre otros, expondrán sus puntos de vista desde diferentes perspectivas”, indica Upegui.
Por ello, también estará presente el catedrático Jorge Giraldo y la mirada desde lo teológico con el padre Francisco de Roux, quien hablará de cómo la paz también es un tema que tiene que ver con el interior.
Las películas
El filme que abrirá el Festival hoy a las 7:30 p.m. es Kinyarwanda, película de 2011 que cuenta cómo los supervivientes al genocidio en Ruanda decidieron convertir las mezquitas en refugios para musulmanes, cristianos, hutus y tutsis.
Esta producción fue elegida entre 12 películas, según explica el director de programación, Oswaldo Osorio, porque a través de diferentes capítulos se cuenta el conflicto y el posconflicto de manera coherente.
“Igualmente, tuvimos en cuenta que, como se exhibirá en el Parque Principal de Jardín, un gran número de toda clase de públicos tendrá la oportunidad de verla y queríamos que todos pudieran apreciarla”, indicó el coordinador de programación.
Ahora bien, lo mejor de la selección, en la que se invirtieron ocho meses y se observaron 50 películas, es que tiene todas miradas distintas del posconflicto.
Visiones de la experiencia sudafricana a través del filme En mi País, dirigido por John Boorman, o la mirada del conflicto en Irlanda del Norte con Cinco minutos en el cielo, donde el hermano de una víctima ve cara a cara a la persona que le hizo daño a su familia, son algunas de las películas que hasta el lunes 4 de julio se verán en Jardín.
Los crímenes de Ruanda parecían imperdonables, lo mismo que lo sucedido en Yugoslavia. En ambos hubo crímenes de lesa humanidad. Ambos se volvieron a recordar en el séptimo arte, y se verán en Jardín. Las películas pueden ser esa forma de curar las heridas y aprender a perdonar.