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Para nadie es un secreto que el alto de El Escobero es una de las cuestas más complicadas de subir en el territorio colombiano. Incluso, muchos equipos profesionales entrenan allí para poder tener dimensión de las exigentes lomas europeas.
No obstante, para muchos aficionados resulta un reto interesante para medir sus fuerzas, sin importar si se llega de primero o último.
A continuación, cuatro relatos de corredores que se prepararon para el desafío que hoy les propone EL COLOMBIANO (ver informe).
Luisa enamora al ciclismo
“Debo decir que he hecho dos veces la subida a El Escobero y me quedo sin palabras para describirla: es demasiado complicada.
Para escalarla hay que tener las pulsaciones a mil, estar pendiente de cada una de las cuestas elevadas y poner todo el entusiasmo porque la energía es clave para no decaer en este intento.
Más allá de lo que pueda pasar por el agotamiento, debo resaltar que se ven paisajes muy hermosos, es un bosque lindo y tranquilo para transitar, la verdad que a la vista es muy agradable, haciéndose interesante.
Comencé a montar bicicleta hace seis años y todo fue un total enamoramiento. Antes de eso, todo en mi vida había sido gimnasio para mantener el estado físico, pero la cicla cambió mi perspectiva.
No obstante, no soy de entrenar en esas cuestas tan complejas, me gusta medírmele más a lo plano, pero el Clásico EL COLOMBIANO es algo a lo que no me puedo negar porque me parece una competencia muy bien organizada y que se ha hecho tradicional para Medellín. Voy con la expectativa de dar todo de mí, pero, sobre todo, a gozármela” (Luisa González)
Carlos Gómez, en cicla de MTB
“Esta escalada a El Escobero la hago con bicicleta de ciclomontañismo porque tiene unas pendientes demasiado exigentes y que requieren una cadencia que solo proporcionan este tipo de ‘caballitos de acero’. Yo me siento muy preparado para correrlo porque lo hago ocho veces al año y soy un tipo que se entrena constantemente. Esta loma es una subida muy brava, con tres paradas en las que hay que alistar con fuerza las piernas para finalizar con un remate cómodo. Ser empleado del sector textil es algo que no me ha impedido seguir dedicado de lleno a mi pasión pues siempre salgo a montar cuatro veces por semana, aunque este 2017 lo he hecho en dos ocasiones cada siete días. Hace cinco años que estoy en esta actividad y me parece muy chévere compartir con la gente. El Clásico EL COLOMBIANO es una oportunidad maravillosa”.
Catalina Orrego, nostálgica
“Recuerdo que cuando tenía 10 años (hoy ostenta 34) iba a ver a mi tío correr el Clásico Ejecutivos (hoy Clásico EL COLOMBIANO) y desde ahí me interesé por participar. La de hoy va a ser mi cuarta experiencia en este evento, pero mi primera subiendo la loma de El Escobero. Vivo en Bogotá por cuestiones de trabajo, soy financista, pero salgo juiciosamente a entrenar. Incluso, vengo de participar en el Gran Fondo de Boyacá y he estado en montañas como el Anglirú y Lagos de Covadonga (España). Yo sé que ganar la competencia de El Reto va a ser muy duro porque soy menor de 35 años y hay niñas muy buenas, pero sí espero divertirme y dejar todo de mí, no tengo miedo y sé que puedo resistir un desafío de estos. Además, estaré en la prueba de ruta del 29 de octubre”.
Wálter Pedraza llega por revancha
“El Escobero, en Envigado, es tan duro, que lo comparo con el Anglirú en Asturias, España. Tienen una longitud parecida, casi de 12 kilómetros, y con rampas que alcanzan el 20 por ciento de desnivel. Desde el principio hasta el final se siente la dureza de esta cuesta. No hay un momento para tomar un descanso. Se sufre demasiado, como me sucedió el año anterior cuando mi excompañero Arley Montoya venció y yo terminé tercero. Esta vez llego mejor preparado, con un mejor nivel, llevo casi año y medio sin lograr una victoria y estoy deseoso de recompensar a mi equipo GW Shimano. Hace ocho días fui segundo en la prueba Trepadores a Manizales. Llego con gran ilusión a El Reto El Escobero, carrera que además nos sirve de preparación para el resto de temporada. Esta cuesta es de alta exigencia, pero muy disfrutable”.